Las preguntas que debes hacerte para cortar bien el césped (y las respuestas)

¿Tu césped no presenta muy buen aspecto? ¿Está mustio y aparece debilitado? Es posible que necesite un tratamiento o que no lo estés bien, algo que es fundamental si quieres que la pradera goce de buena salud. Por eso, antes de empuñar el cortacésped o de poner en marcha la segadora es el momento de repasar algunas claves sencillas para lograr el mejor resultado.

¿Con qué frecuencia hay que cortar el césped?

La frecuencia con la que tendrás que pasar el cortacésped depende de la variedad que hayas plantado y, además, de otros factores como la época del año, el riego, etc.

Puedes establecer una pauta general de corte basada en las estaciones: durante la primavera y el otoño lo tendrás que regar cada 5 o 10 días aproximadamente, en verano una vez a la semana (puesto que se ralentiza su crecimiento), y en invierno una vez al mes.

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¿A qué altura debes segar la hierba?

No se trata de sacar la regla y medir el césped, sino de saber que no conviene dejarlo demasiado corto. Depende también de la semilla en cuestión, aunque debes saber que cuanto más corto lo dejes, más mantenimiento va a exigir y más difícil será conseguir que se mantenga en condiciones óptimas.

Lo ideal es dejarlo entre 3 y 5 cm en primavera y en otoño. En verano y en invierno, épocas más problemáticas para el césped, no lo dejes más bajo de 5 cm.

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¿Puedo dejarlo unos días sin cortar?

Ya sabemos que cortar el césped, a pesar de la maquinaria de jardín que puede ayudarnos mucho, no es una tarea apetecible, y menos en verano. Sin embargo, es importante que no dejes pasar demasiado tiempo entre siega y siega.

Si lo dejas crecer demasiado, después no podrás hacerlo todo de una sola vez, ya que la hierba sufrirá bastante. Tendrás que segarlo en dos días diferentes para dejarlo a la altura adecuada.

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¿Lo siego seco o mojado?

Seguro que has oído en muchas ocasiones que no es bueno cortar el césped mojado, y aunque es cierto que no conviene hacerlo cuando la hierba está empapada ya que el suelo podría compactarse en exceso, tampoco es adecuado pasar la segadora cuando el terreno está excesivamente seco. Lo mejor es hacerlo algunas horas después de haberlo regado.

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¿En qué dirección hay que cortarlo?

Lo importante, en cuanto a la dirección de corte, es que vayas cambiando y no lo hagas siempre en la misma. Si primero lo haces a lo largo de la pradera, después a lo ancho y a continuación en diagonal, conseguirás cortes más limpios y la hierba estará más sana. Los cortes en todas las direcciones favorecen que el césped crezca adecuadamente, en vertical.

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¿Cómo elegir el cortacésped?

La clave para responder esta pregunta está en las dimensiones de la pradera que tengas que cortar. Si tienes un jardín de dimensiones reducidas o incluso mediano, te bastará con un modelo pequeño.

Es importante que lleve motor a gasolina, porque así contará con la suficiente potencia y evitarás tener que lidiar con el cable de alimentación a la red. En los modelos eléctricos se convierte en un inconveniente.

¿Tu jardín es muy grande o está en pendiente? Elige un cortacésped con tracción o autopropulsión, para no tener que empujarlo.

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¿Qué mantenimiento hay que hacer al cortacésped?

Aparte de los cuidados recomendados por el fabricante, conviene mantener las cuchillas en buen estado, ya que de lo contrario cortarán mal y la hierba sufrirá y se estropeará. Afila las cuchillas cuando sea necesario.

También es importante desinfectar la superficie de corte una vez hayas terminado de segar el césped, ya que esto te ayuda a evitar la proliferación de hongos en tu pradera.

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¿Cuáles son las claves para un buen trabajo de corte?

Aunque la práctica es la mejor maestra a la hora de aprender a segar el césped, hay ciertas recomendaciones que puedes seguir para lograr buenos resultados desde el principio.

- Trata de trazar líneas rectas con el cortacésped.

- Sortea los obstáculos que encuentres a tu paso, como los aspersores de riego o alguna roca.

- Termina recortando los bordes de la pradera con una desbrozadora.

- Recoge los restos de hierba para no fomentar la aparición de hongos. Puedes emplearlos para hacer compost o como acolchado para las plantas.

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¿Existe algún tipo de césped que requiera un corte poco frecuente?

Aunque como ya hemos dicho la frecuencia de corte depende de varios factores, siempre podemos evitar las especies de crecimiento rápido, como pueden ser el ray-grass inglés o la Festuca arundinacea. Es mejor optar por semillas de crecimiento lento como la Zoysia japonica.

También conviene regar y abonar menos el césped, lo que controla el crecimiento.

Por último, puedes utilizar un retardante del crecimiento, un producto que se aplica al césped y consigue reducir la frecuencia con la que tendrás que segarlo.

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