En la revista siempre os insistimos en el mensaje de que una forma interesante de aprovechar el espacio es en vertical, puede ser mediante literas, un altillo u otro elemento en alto. Pues bien, también los jardines verticales son una solución, en este caso decorativa, si te falta espacio en la terraza o los interiores de la casa. Y no es necesario que no sobren los metros, porque resultan un recurso estético para llenar de verde las paredes y alegrarlas con su nota fresca y natural.
Si estás valorando la posibilidad de instalar un jardín vertical repleto de plantas en tu hogar, lee antes estos consejos expertos para saberlo todo sobre ellos. Nos asesoran Jordi Sánchez San Miguel, director creativo de la empresa de paisajismo Simbiosi Estudi y José Abraham Pérez Palma, Técnico en Jardinería y Paisajismo y gerente en MyD Jardines Paisajismo.
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¿En qué consisten los jardines verticales?
José Abraham explica que “como su propio nombre indica, son estructuras verticales que acogen diferentes especies vegetales para crear una cubierta vegetal”. Jordi añade que “es posible su instalación tanto en interiores como exteriores, y favorecen el reverdecimiento de nuestro entorno urbano”.
Los diseños no siempre deben ocupar grandes paños de pared, también hay la posibilidad de instalar varios jardines verticales de distinto tamaño e incluso forma: redonda, ovalada, rectangular… Eso ya depende de los gustos personales de cada uno. Y los hay que no se fijan en la pared, sino que son como un elemento tipo biombo repleto de plantas naturales.
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¿Dónde puedo ponerlos?
Indistintamente en exteriores (como balcones, terrazas, patios y jardines) e interiores, y en este último caso incluso en espacios oscuros.
Ambos expertos coinciden en que se tiene que escoger una correcta selección de las especies botánicas. Aparte, José Abraham recomienda encarecidamente el uso de riego automático, que permita descuidarnos de estas tareas, así pues, “es imprescindible que el sitio donde se instale el jardín vertical disponga de una toma de agua y un desagüe para el sobrante del riego. Teniendo esto y con la correcta elección de plantas, cualquier sitio es perfecto para disfrutar de este tipo de jardines. Incluso en sitios de muy poca luz natural, pero entonces habrá que instalar focos que imitan la luz solar”.
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La iluminación, vital en interiores
Un aspecto a tener en cuenta en los ambientes dentro de la vivienda es cuidar su iluminación. Simbiosi Estudi aconseja “iluminar el muro vegetal con una intensidad de luz aproximadamente de 1.000 a 1.500 luxes para favorecer el desarrollo de las especies seleccionadas. Si no se garantiza una iluminación adecuada, la vegetación no prosperará convenientemente, y la apariencia del jardín vertical se verá afectada en gran medida”.
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Pasos previos al montaje
Jordi relata que “para los montajes profesionales, antes de nada, los paisajistas haremos un pequeño estudio de la situación del emplazamiento, realizaremos un diseño previo, y prepararemos las preinstalaciones de riego e iluminación, en caso necesario. Una vez definamos estos detalles, ya podemos fijar el conjunto de soporte que sustentará el jardín vertical”.
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Sistemas de instalación
Existen varios y van a depender tanto de las plantas a cultivar, como del espacio donde irá ubicado el jardín vertical y de si el sistema a emplear es hidropónico (sin tierra) o de sustrato orgánico.
Simbiosi Estudi detalla cómo proceder según el sistema seleccionado:
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En caso de un cultivo hidropónico, instalaremos las capas téxtiles donde plantaremos las especies seleccionadas, así como el sistema de riego.
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En cuanto a los sistemas de sustrato orgánico, anclaremos los módulos correspondientes, pudiendo estar precultivados, agilizando la cobertura verde en un menor tiempo. De igual manera, dispondremos el riego automático y lo ajustaremos para unificar la aportación de agua en todos los niveles.
MyD Jardines Paisajismo comenta que ellos siempre instalan con este sistema que ofrece múltiples ventajas (lo vemos en la imagen): “sujetamos una estructura metálica a la pared separada de esta para evitar humedades. Luego sobre esta estructura se instalan bolsas de geotextil donde albergar las diferentes especies. El riego por goteo queda tapado dentro de estas bolsas, con lo que no son visibles y su efectividad es del 100%”.
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¿Qué plantas pueden conformar un jardín vertical?
Los jardines verticales pueden ser de una única planta o mezclando varias. Respecto a las variedades, habrá que tener cuidado en que sea de tamaño medio. MyD Jardines Paisajismo relata que “pueden utilizarse en este tipo de jardines planta arbustiva, planta de flor, planta colgante... lo importante es un buen diseño, una buena elección de plantas y una buena ejecución del proyecto. Hay que tener en cuenta el tamaño de las bolsas de plantación, ya que el tamaño está limitado a plantas de maceta de unos 17 cm como máximo”.
Desde Simbiosi Estudi comentan que “como en cualquier otro proyecto de jardinería, podremos emplear un amplio abanico botánico, teniendo siempre en cuenta las exigencias de las especies elegidas, su crecimiento, sistema radicular (las raíces)... En nuestros diseños combinamos diversos tipos de plantas suculentas, como Agave attenuata y Senecio mandraliscae, especies de follaje exuberante, como Monstera deliciosa y Philodendron bipinnatifidum, enredaderas, como Ficus pumila e, incluso, gramíneas del género Carex. ¡Las posibilidades son infinitas!”.
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Fácil mantenimiento
Por suerte los cuidados pueden dejarse en manos propias, no se precisa de profesionales. Bastará con revisar el riego automático. José Abraham cuenta que también son precisos “uno o dos abonados al año, y por supuesto, el recorte de plantas y la separación de especies (si se combinan varias) para que no se pierda el diseño original”.
Jordi precisa que “el mantenimiento irá estrechamente ligado a las plantas seleccionadas, así pues, un jardín vertical de suculentas necesitará menos atenciones que otro con vegetación tropical”.
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Alternativas (casi) igual de efectivas
Varios pueden ser los motivos por los que no quieras instalar un jardín vertical natural, aunque como hemos visto su cuidado es de lo más sencillo. Si es tu caso no te preocupes, puedes conformarlo con plantas artificiales que estéticamente parezcan verdaderas o, si lo prefieres, plantas preservadas. No obstante, en estos casos no te beneficiarás de los efectos purificadores de aire que tienen las plantas vivas.