Aunque parezca mentira tan difícil (o casi) es decorar un baño pequeño que uno grande. En el primer caso, el ingenio se enfrenta a la falta de metros, mientras que, en el segundo, el uso que vas a darle, la funcionalidad de los elementos o la calidez son sus tres retos principales. Además, tan sencillo es caer en el ‘horror vacui’ como en el exceso y convertir el sueño de muchos, en una estancia vacía o abarrotada, donde no te sientes nunca a gusto. Te lo aseguramos, estas ideas de decoración harán del baño tu nuevo lugar preferido de la casa. ¡Tiembla salón!
1. Distribuye adecuadamente
Aquí el eterno dilema ¿ducha o bañera? se sustituye por ¿divido y venceré? Y ambas preguntas se responden siempre con un ‘depende’. Depende de los metros disponibles y de la planta. Lo que tenemos claro es que el inodoro debe estar aparte y, a ser posible, cerrado con una puerta, que dé privacidad. Lo ideal es que establezcas las zonas mediante los elementos o, como en esta propuesta de Duravit, que juegues con la doble altura, el medio tabique de lamas de madera y la alfombra para dividir sin restar metros visuales, incluso la puerta del WC es corredera.
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2. Resérvate un rincón para ti
Lo bueno de los espacios amplios es que hay sitio para todo, incluso para colocar un rincón de relax, con permiso de la bañera que en el siglo XXI se ha convertido en el nuevo sofá, donde no solo echarse crema o esperar los 20 minutos de la mascarilla sino también relajarse o leer un libro en albornoz, disfrutando del momento. Para ello, es requisito imprescindible contar con un asiento cómodo, olvídate del típico taburete, tener un punto de luz extra, que te ilumine o no según el momento, y rodearse de complementos como velas, flores y adornos que multipliquen la calidez. Esta propuesta de Terratinta cumple todos los requisitos y más, ya que el bello suelo actúa como una cálida alfombra.
3. Apuesta por la adaptabilidad
El espacio debe adaptarse a tus necesidades y a tus gustos, no al revés. “Es fundamental que sea cómodo para todos, sobre todo, si tenemos en cuenta que es una parte de la casa cuya funcionalidad ha variado hasta convertirse en mucho más que un lugar de paso, en un espacio para la desconexión y el relax”, señalan desde Duscholux. Por eso, todo desde los revestimientos hasta la mampara o el mobiliario tiene que elegirse con cuidado y mostrar tu personalidad.
4. No olvides el ‘menos es más’
El error que se suele cometer cuando te enfrentas a ambientes amplios es querer rellenar todo con muebles y accesorios, incluso el número de toallas se multiplica sin motivo. Sin embargo, es importante que mantengas la calma y sigas la regla del ‘menos es más’, para crear un espacio ordenado donde cada elemento tenga una función, no falte nada, pero tampoco sobre, como en este ambiente de Ballingslöv. Se trata de buscar el equilibrio entre los metros, las distintas zonas y los accesorios, para que no parezca caótico ni tampoco desangelado. Por cierto, minimalismo visual no significa prescindir de adornos, plantas o velas sino de usarlos con contención.
5. Busca su lado ‘spa’
Lo bueno de los baños amplios, frente a los de pocos metros, es la oportunidad que brindan para convertirse en un ‘spa’ sin esfuerzo, ya que parece que han nacido con esa vocación. Sus dimensiones permiten instalar una bañera exenta, una ducha e, incluso, una sauna en algunos casos. Para favorecer esa atmósfera, deja que entre la luz natural, como en esta propuesta de Rehau, recurre a una decoración ‘wellness’ que cree ambiente y te inspire, di sí a las plantas y a lo natural y, por supuesto, mantén siempre el orden y la sensación de limpieza visual.
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6. Atrévete con los colores oscuros
Lo bueno de los espacios amplios es que no tienen prohibida la entrada a los tonos oscuros y no necesitan usar siempre los beneficios espaciales que reporta el blanco y las tonalidades claras. Por eso, si eres fan del ‘total black’ y piensas que no hay color más sofisticado, elegante y dramático que el negro, estás de enhorabuena. No temas su poder, úsalo en paredes, revestimiento, mobiliario e, incluso, en las toallas. Una pincelada blanca, como en esta propuesta de Roca, potenciará su magnetismo.
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7. Sé creativa
Y monta un rincón ‘gym’. Si durante el confinamiento no has podido ir al gimnasio y te has tenido que conformar con clases online en medio del salón, una buena manera de sacar partido a los metros del baño es creando una zona con todo lo que necesitas para practicar ejercicio en casa, cómodamente y sin necesidad de mover muebles de sitio, como muestra este ambiente de Scavolini. Recuerda que, además de los accesorios y la maquinaria, es preciso que cuente con una buena ventilación y con un suelo resistente.
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8. Usa la luz a tu favor
Si en los baños pequeños la iluminación se usa para ganar sensación de amplitud, en los grandes su misión es evitar las zonas oscuras y proporcionar la luz que necesitas en cada zona. “Por ello, es importante potenciar la natural y complementar con artificial. Esto implica multiplicar las fuentes en toda la estancia: techo, paredes, cerca del espejo e, incluso, en los muebles si fuera necesario”, aconsejan desde Duscholux. Para no equivocarte, recuerda que un buen proyecto lumínico para tu baño debe contar con una luz general suave de unos 100 lux (lúmenes por metro cuadrado), preferiblemente led; combinada con otra funcional que faciliten la rutina de la higiene y una de ambiente que proporcione sensación de relax.
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9. Elige un plato de ducha XL
El ‘momento ducha’ en el que se te cae el jabón y no sabes cómo cogerlo sin perder el equilibrio ni las formas forma parte del pasado. Los baños XL permiten instalar un plato de ducha grande y espacioso (de 100 x 200 cm), donde no solo podrás moverte cómodamente, sino también secarte, ya que permite crear una zona para secarte y vestirte. Aprovecha e instala una grifería termostática o una columna que mejore la experiencia, como en esta propuesta de Genebre. Recuerda que para que el acceso sea cómodo y la salida aún más, debes dejar un cuadrado libre de 60 x 60 cm.
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10. Alarga tu encimera todo lo que puedas
Para que puedas dejar tu neceser ‘beauty’ mientras te maquillas, extiendas tu colección de accesorios para elegir el idóneo para ese ‘look’ o simplemente encuentres hueco para tu ritual de quitarte o ponerte las lentillas. Una encimera infinita, como esta de Hi-Macs, aunque ordenada y limpia, es uno de esos pequeños lujos de los baños grandes. Además, si se trata de un espacio compartido, incluso familiar, resulta muy práctica para ubicar dos lavamanos. Recuerda que la distancia óptima entre las dos griferías es de 60-90 cm, así estarán cerca, pero no pegados y serán mucho más cómodos cuando se usan por dos personas a la vez.
11. Multiplica el espacio para almacenar
Está demostrado que cuanto más espacio tienes, más cosas almacenas. Por eso, además de recomendarte hacer limpieza de cosméticos y productos de higiene, no dudes en colocar muebles con capacidad para guardar, como este de Antonio Lupi, que es un auténtico armario y te permitirá desahogar otra estancia. No olvides los bajolavabos ni los modelos en columna, pero tampoco los espejos con armarito o las baldas.
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