Existen un buen número de trucos caseros para que la casa huela bien: con flores frescas o secas, vinagre, limón… En el caso de los armarios y las cómodas te proponemos hacer unos ambientadores sólidos que no solo desprenden una suave y agradable fragancia sino que, además, adornan. Era un truco que empleaban nuestras abuelas, en ocasiones se trataba de jabones, y verás que logrará que un buen aroma conquiste tus prendas de ropa.
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En este paso a paso te proponemos hacer cuatro, para que los alojes en la cómoda o en las cajoneras del armario o vestidor y, también, tengas la oportunidad de regalar alguno. Modifica las cantidades proporcionalmente si vas a elaborar menos (o más).
Materiales e ingredientes para cuatro ambientadores sólidos
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Cuatro moldes de silicona
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Una jarra o un cazo metálico
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Unas pinzas pequeñas metálicas
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Un palo pequeño
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Un ojete (o arandela) de poco diámetro
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Una cuerda fina
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Cera vegetal de soja (100 gr)
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Aceites botánicos (10 gr)
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Flor seca preservada o, si se prefiere, fruta deshidratada
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Varias formas de personalizarlos
Los ambientadores sólidos que vamos a mostrarte en este DIY son veganos y se han elaborado con aceites botánicos; se necesita el 10% en relación con la cera vegetal de soja. No obstante, si en lugar de aceites quieres emplear esencias, para dar la fragancia a la pieza, ten en cuenta que deberás poner solo un 5%.
Nicolás y Carlos, del estudio asturiano de velas artesanales Eleven People, nos cuentan el sencillo proceso para hacer estos ambientadores y los trucos para personalizarlos. Por ejemplo, el molde puede ser de las formas más variadas: redondo, ovalado, hexagonal, romboidal e incluso reproduciendo formas de flor, estrella… Eso sí, “recomendamos que sean de silicona para un fácil desmoldado”, detallan. Y de al menos 1 cm de profundidad, aunque pueden ser más hondos, todo dependerá del grosor que queramos darle a nuestros ambientadores sólidos.
Paso 1: Derretir la cera con los aceites
Derretimos la cera vegetal de soja a fuego lento, es importante no acelerar el proceso y controlar siempre la temperatura. Además no conviene ir con prisas dado que este paso a paso lo terminarás en una media hora.
A continuación, se vierten los aceites botánicos (con olor a lavanda, rosas, romero…) que son los que ofrecerán aroma al ambientador sólido. Como te hemos comentado antes, en lugar de estos puedes emplear aceites esenciales si lo prefieres. Con todo listo, vertemos la mezcla en el molde reutilizable de silicona.
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Paso 2: Decorar con mimo
Esperamos a que se vaya solidificando y, empleando flor seca preservada o, si se prefiere fruta deshidratada, se incorpora la decoración con ayuda de unas pequeñas pinzas metálicas.
Ten en cuenta que quedará mejor si no recargas mucho el conjunto, emplea menos de la mitad de la superficie para estos adornos que darán un toque natural y de color a la pieza. Y distribúyelos con mimo, nunca uno encima del otro. Por eso te hemos aconsejado el empleo de unas pinzas en lugar de hacerlo a mano, que daría un resultado menos delicado.
Paso 3: Incorpórarle una cinta
Esperamos a que se solidifique por completo pero que la mezcla esté algo tierna para realizar, con la ayuda de un palo, un agujero. Le colocamos la arandela y hacemos correr la cinta. Así, gracias a la cuerda, podrás colgar los ambientadores donde quieras. ¡Ya está listo para decorar y perfumar tu armario o cajón! Como has visto, empleando tan solo tres sencillos pasos.
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Si lo deseas, ambientadores de temporada
Ten en cuenta que las posibilidades de aromas para tu ambientador son casi infinitas. Una buena idea puede ser emplear notas cítricas a naranja o limón durante los meses de invierno, pero que invada un veraniego olor a jazmín o lavanda durante el estío. Todo esto ya queda a tu elección y dependerá de tus gustos personales. Piensa que puedes elaborarlos con tus hijos, siempre que tengas cuidado en verter tú la mezcla caliente de cera y aceites.
Sin duda, estos ambientadores sólidos son mejores que los jabones que ponían en el armario nuestras abuelas, pues resultan más decorativos. Y no solo eso, también presentan una fragancia más intensa. Decoran más y dan más olor: los ambientadores sólidos son perfectos. Encima, la materia prima principal para hacerlos, la cera de soja, es un recurso renovable, totalmente natural, no resulta tóxica y, muy importante para todas aquellas personas veganas, está libre de sustancias animales.
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