Crear un ambiente tranquilo y sereno en el dormitorio es fundamental para dormir y descansar al máximo. Para lograrlo hay ciertas premisas que han de cumplirse y una de ellas es la de elegir la iluminación adecuada: suave, cálida y confortable. Aquí tienes un repaso de las opciones más interesantes.
¿Cuánta luz necesito en mi dormitorio?
Para saber si cuentas con mucha o poca luz en el dormitorio tendrás que valorar todas las fuentes de iluminación que se incluyen en él: desde la lámpara de techo hasta los focos empotrados, si los tienes.
También los apliques de la pared y cualquier otro punto de luz indirecta por tenue que te parezca. Ten en cuenta el diseño de la iluminación de la estancia para saber hasta qué punto necesitas remodelarlo.
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En busca de una iluminación homogénea
A pesar de que es importante optar por una luz tenue y matizada en el dormitorio, que no provoque deslumbramientos ni sea demasiado intensa, la iluminación ha de ser homogénea y regular, suficiente para las actividades que realizas allí. No debe crear espacios de sombra y, además, ha de ser cálida y agradable.
Una buena idea es emplear tecnología LED, ya que consume un 85% menos de energía, lo que se traduce en un beneficio para el medioambiente y también para tu economía.
Que no falte una luz general
Una lámpara suspendida en el techo es una de las formas más habituales de dotar al dormitorio de una luz general, al tiempo que se añade un elemento decorativo al espacio. Como el punto de luz suele quedar sobre la cama, puedes elegir un modelo grande y especial, ya que no estorbará al paso ni restará espacio en altura.
En cualquier caso, a la hora de elegir la lámpara de techo es importante tener en cuenta las dimensiones de la habitación para que el resultado sea equilibrado.
Además de las luminarias colgantes puedes apostar por otro tipo de soluciones como los plafones, perfectos para techos bajos, o los focos empotrados.
Focos de techo o "downlights"
Esta opción para iluminar el dormitorio de forma general es adecuado siempre que cuentes con un falso techo, aunque tenga poco fondo. Los focos empotrados son la clave para conseguir una iluminación funcional, perfecta para espacios contemporáneos y minimalistas, ya que no recargan la decoración del dormitorio.
A la hora de instalarlos, estudia bien dónde tienes que colocarlos para que no produzcan sombras.
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La magia de la luz indirecta
Complementar la luz general del dormitorio con una iluminación indirecta, más suave y relajada, te permitirá crear ambientes diferentes. Para conseguirlo puedes instalar apliques en las paredes que proporcionen una luz tenue. Podrás encenderlos cuando no necesites demasiada claridad, en momentos de relax.
Otra forma de conseguir este tipo de iluminación más suave es instalar un regulador de intensidad en el interruptor que controla la luz general, ya se trate de una lámpara de techo, de plafones o focos empotrados.
Disfruta de la lectura
Si te gusta leer en la cama antes de dormir no puede faltarte una lámpara focalizada, bien sobre la mesilla de noche, o bien instalada en la pared, a modo de aplique.
Puede ser un foco dirigible, mejor con pantalla para evitar deslumbramientos, y que emita una luz neutra, ya que es más cómoda para la vista a largo plazo.
Tienes a tu disposición un larguísimo repertorio de modelos, diseños y soluciones para que puedas elegir la que mejor le va a tu dormitorio.
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Para orientarte en la noche
¿Necesitas en el dormitorio una luz que te guíe cuando tienes que levantarte por la noche? ¿Tus hijos son pequeños y tienes que atenderlos? Ahora dispones de soluciones especiales para orientarte en medio de la noche y que puedas volver a la cama sin sobresaltos.
Como tiras de led que se instalan bajo la cama y que se encienden y se apagan con un mando a distancia. Así no tendrás que encender todas las luces.
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También en los armarios
Instalar un punto de luz en el interior del armario o vestidor es una idea muy práctica que, además, cuesta muy poco, ya que no necesitas hacer ningún tipo de instalación. Decídete por una tira de luces LED o por una bombilla adecuada que funcione con pilas. Práctico y sencillo.
Si compartes habitación con tu pareja una luz en el armario puede convertirse en todo un acierto: encontrarás toda tu ropa por la mañana sin perturbar su descanso.
Para combatir el calor
Si quieres instalar un ventilador de techo que te ayude a combatir las altas temperaturas de verano, apuesta por un modelo que tenga, además, luz. Así podrás colocarlo en lugar de tu lámpara colgante sin que el dormitorio pierda esa iluminación general. Hoy cuentas con modelos muy avanzados y supersilenciosos que, además resultan de lo más decorativos.
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