Estos son los errores que se suelen cometer en la organización de la cocina

La cocina es uno de los espacios más importantes de la casa. Allí pasamos muchas horas al día cocinando, comiendo o trabajando. Por eso conviene que hagamos de ella un lugar cómodo, práctico, que nos haga la vida más fácil.

La clave, o al menos una de ellas, está en plantear de forma correcta la organización de utensilios, alimentos y demás elementos. Sin embargo, son varios los errores que se suelen cometer en la organización de la cocina.

Algunos son equivocaciones iniciales en el propio diseño del mobiliario y distribución, mientras que otros, más fáciles de resolver, tienen origen en el desorden y en la falta de previsión. Descubre la mejor manera de acabar con ellos.

Planificar una mala distribución general

Si estás pensando en renovar tu cocina de manera integral, una de las cosas que debes tener en cuenta es la distribución de los diferentes elementos en el espacio disponible. Una buena planificación que tenga en cuenta tus necesidades te ayudará a tenerlo todo bajo control y a que las rutinas diarias sean más prácticas y fáciles.

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No reflexionar al establecer el orden de las cosas

Una equivocación muy común es colocar los utensilios donde encontramos espacio libre, y no donde realmente es más práctico. A la hora de asignar un hueco a cada cosa para guardarla, lo mejor es clasificar los objetos teniendo en cuenta su uso.

Por ejemplo, puedes guardar juntas aquellas cosas que necesitas para los desayunos, desde la cafetera hasta el menaje y las tazas. O almacenar los moldes y bandejas de hornear cerca del horno.

Para tenerlo todo a mano y accesible ayúdate de elementos de ordenación como cajas, cestas, botelleros, etc.

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Llenar la encimera de cosas

No mantener despejada la encimera es un error que te pasará factura en lo que al orden se refiere. Comienzas dejando encima solamente un par de cosas, y terminas sin tener apenas espacio para trabajar. Lo mejor es dejar la encimera libre de utensilios. Busca un lugar donde guardar todo lo que tienes allí y verás cómo aumenta la sensación de orden.

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No instalar armarios hasta el techo

Ya sabemos que los estantes volados en la cocina aportan mayor ligereza visual, pero también es cierto que no aprovechan el espacio al máximo. Con los armarios la cosa es diferente ya que se pueden guardar muchas más cosas en ellos.

Por eso, si tu cocina es pequeña, es buena idea apostar por armarios que lleguen hasta el techo. Así en las baldas superiores podrás guardar todo aquello que utilizas menos, y dejar las inferiores para los utensilios que necesitas a diario.

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No aprovechar el espacio interior de los armarios

¿No tienes muchas baldas dentro de los armarios y queda mucho hueco libre en vertical? De esa manera se desaprovecha totalmente espacio de almacenaje, por lo que conviene evitarlo con alguna de estas soluciones:

- Si los estantes son regulables, colócalos a la altura conveniente para no dejar ni un centímetro sin aprovechar.

- Coloca estantes independientes elevadores.

- Coloca ganchos para colgar tazas en la balda superior.

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Apilar utensilios dentro de los muebles

Colocar los diferentes objetos unos encima de otros no es una buena idea, si estás buscando las mejores soluciones de orden y almacenaje. Apilar las cosas es poco práctico, ya sean las tapas de las cazuelas, los recipientes para conservar alimentos o las sartenes. Te costará encontrar lo que buscas y, además, no lo tendrás accesible.

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Dejar que prolifere el desorden en los cajones

Si los cajones de tu cocina son un verdadero desastre y te resulta imposible encontrar lo que buscas, puede que tengas que plantearte un cambio en la forma de organizarlos. Tenerlo todo mezclado, desde cubiertos hasta utensilios de servir o cuchillos, además de peligroso (puedes cortarte con los cuchillos por accidente) hace que aumente la sensación de caos.

Coloca separadores en los cajones para tenerlo todo ordenado. Los tienes de diversos materiales y de las medidas necesarias.

Hazte con un soporte magnético de cuchillos para instalar en la pared: estarán más ordenados, sin riesgo de cortes y evitarás que se estropeen los filos.

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Guardar los alimentos en sus envases originales

Olvídate de almacenar los alimentos en sus cajas de cartón o en los paquetes de plástico. Lo mejor es deshacerse de todos esos envoltorios que se rompen fácilmente, provocando desorden y suciedad.

Hazte con botes para guardar los alimentos y ganarás orden y limpieza. Deben ser todos los botes iguales, para que sea más sencillo apilarlos o agruparlos. Elígelos transparentes y será más fácil encontrar lo que buscas, ya que ves el contenido al primer vistazo.

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No apostar por la calidad

Tanto en la elección de los recipientes para guardar alimentos como en los objetos organizadores en la cocina, desde colgadores a separadores, elegir elementos de calidad es fundamental, aunque tengamos que hacer una mayor inversión económica.

Los botes baratos al final resultan poco prácticos y duraderos. Elige contenedores de calidad, mejor de cristal que de plástico: se conservarán mejor y resultarán más sostenibles.

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