Cabeceros de cama que se salen de la norma y que darán personalidad a tu dormitorio

El dormitorio es la estancia más privada de nuestras casas: donde nos relajamos, descansamos y buscamos tranquilidad e intimidad a partes iguales. Por eso, incluir una pieza especial que dé personalidad y carácter a la estancia hará que se convierta en rey del dormitorio, como el sofá lo es del salón. Para hacerlo intenta huir de los tradicionales cabeceros de cama de madera o tapizados, muy elegantes pero todos similares entre sí. Te ofrecemos 10 propuestas para que tu dormitorio parezca otro, más moderno y mucho más personal. Los hay de obra, retroiluminados, de cuerdas y hasta que llegan hasta el techo. ¿Te animas a ver nuestra galería?

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Un cabecero que es una estantería

Protegiendo la cama, este cabecero está diseñado especialmente para dormitorios pequeños en los que se quiere exprimir al máximo todo el espacio. Por eso, se ha planificado un cabecero que, si bien ocupa toda la pared, es ligero gracias a su diseño blanco. Además, se ha empleado para colocar libros, alguna caja de almacenaje y, cómo no, varios adornos que dan personalidad al espacio. Y, aunque el dormitorio prescinde de las mesitas de noche, es la estantería la que cumple con esta función. Resultón, ¿verdad?  

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Un cabecero de obra iluminado

Los cabeceros de obra se han convertido en una de las opciones favoritas de los interioristas y es que son decorativos y amplían y aprovechan el espacio. Y este de la interiorista Aida Carrillo es de lo más original, ya que, además de estar iluminado con luces led, tras las puertas de color negro esconden espacio de almacenaje que hace las veces de mesita de noche. Otra opción es dejar el hueco sin puerta, una alternativa que conseguirá que el espacio se perciba más ligero. 

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Un panel tapizado flanqueado por espejos

A veces el cabecero de la cama ocupa toda la pared, como en esta propuesta. Un panel tapizado sube hasta el techo, ofreciendo una superficie cómoda en la que apoyarse si te gusta leer en la cama o disfrutar de una película cómodamente. Para darle aún más calidez, los perfiles de madera ayudan a subir la temperatura y potenciar aún más la elegancia del dormitorio. Si, además, está flanqueado por sendos espejos a cada lado tendrás un lugar en el que verte de cuerpo entero. Pero también cumplirá la función de ampliar el espacio y multiplicar la luminosidad. 

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Un tapiz decorativo a modo de cabecero

Decorar la pared del cabecero es básico para que tenga carácter, sea más acogedor y el efecto más decorativo. Pero, ¿por qué no unir la función del cabecero con la decorativa? Coloca un tapiz, como en este proyecto de Egue y Seta, coronando el dormitorio. Al igual que un cabecero, aislará la pared y la protegerá de la suciedad y a ti del frío, además de decorar la pared y dar mucha personalidad a la estancia. 

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Un cabecero de madera, con luz y espacio para guardar

Lo hemos dicho, están de moda. Los cabeceros a medida son ideales para que encajen en un hueco determinado. Y este diseñado por Egue y Seta lo tiene todo: desde una zona tapizada que da calidez, a espacios en los que dejar las gafas o el libro que estés leyendo y, cómo no, luz ambiental colocada estratégicamente para dar más empaque a la cama y resaltar su presencia. Al ser de madera, la calidez se ve asegurada, y al tener espacio para apoyar es genial para colocar unas velas, unas plantas de interior o ser el apoyo de un cuadro. 

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Un cabecero tapizado a juego con el pie de cama

Nos encantan los cabeceros que llegan hasta el techo y, además, están tapizados con elegantes y soberbio tejidos, como este de esta propuesta de PortobelloStreet, que encuentra además su pareja con un banco a los pies de la cama. Tapizado con las mismas telas, se cierra el conjunto y dota al dormitorio de una zona única para calzarte y dejar la ropa. Aunque el modelo presume de un corte más bien clásico, al llegar hasta el techo, aumenta la sensación de los altos techos. 

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Dorado y cuerdas, ¡qué combinación!

Los acabados en dorado llegaron tímidamente hace unos años con un aspecto renovado, más moderno. Y lo mismo ha pasado con las cuerdas, que las hemos visto en las últimas tendencias de muebles de jardín. Pero, ¿qué pasa cuando se unen ambos elementos? Pues que da lugar a un cabecero no solo original, sino también moderno, actual y muy muy decorativo, puede decirse que hasta con un punto ciertamente industrial. 

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Un cabecero que actúa a modo de separador

Porque detrás se ubica el vestidor, de manera que ambos espacios, el de descanso y el de la ropa, quedan separados físicamente. Pero si algo enamora de este original cabecero de cama son las lámparas que incluye a ambos lados de la pieza. Además, al ser de madera, con una parte tapizada, el resultado es elegante y sobrio, aunque no deja de tener cierto punto moderno gracias a las luminarias negras de estilo contemporáneo. 

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Con almacenaje incluido

¿Eres de los que guardan las almohadas cuando no las usan y los cojines cuando te vas a la cama? Este cabecero es para ti. Incluye una zona con almacenaje con puertas abatibles, de manera que, cuando están cerradas, ni se perciben. En dormitorios pequeños en los que hay que prescindir de algún elemento, las mesitas suelen ser las más vilipendiadas. Ahora, aunque te veas en la necesidad de quitarlas, no prescindas de una superficie en la que puedas colocar las gafas, el despertador o unas lámparas. 

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Simplemente, molduras

Cuando las paredes están decoradas con molduras, estas tienen tanta fuerza que es posible prescindir de un cabecero. De hecho, estas harán las funciones de delimitar el espacio de la cama sin perder estilazo. De hecho, todo lo contrario. En los últimos tiempos, las molduras han visto un renacer gracias a los nuevos materiales con los que se fabrican y su facilidad de colocación. Incluso se pueden colocar unos paneles de madera a media altura, a modo de friso. 

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