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Matthew McConaughey ya tiene la casa de sus sueños. El protagonista de Interestellar ha querido invertir en una vivienda de verano donde poder desconectar de la vida acelerada y el ajetreo de Los Ángeles, y el destino elegido para disfrutar con su esposa y sus tres hijos no es otro que Kailua-Kona, en Hawái . Este es, de hecho, uno de los lugares favoritos de los celebrities, por su cercanía con la capital del cine, pero a su vez por la tranquilidad que desprende. En pleno Océano Pacífico, con unas vistas de excepción, y, sobre todo, mucha privacidad, así es el exótico hogar por el que el actor ha pagado más de 6 millones de euros (cerca de 8 millones de dólares).
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El ganador del Oscar por Dallas Buyers Club no ha reparado en lujos y comodidades para su nuevo refugio. La vivienda, que dispone de 495 metros cuadrados, tiene un total de seis dormitorios, seis baños y un aseo. También cuenta con dos cocinas, una bodega, una sala de cine y multiusos, y una barbacoa en el jardín donde, por supuesto, no falta una piscina de agua cristalina.
Alejado de la mirada de curiosos
El refugio de la familia McConaughey se encuentra muy apartado de la civilización y del ajetreo turístico, sin vecinos alrededor. Tanto es así que la casa se levanta sobre una parcela sin edificaciones colindantes. Parece ‘clavada’ en medio de la nada, perfecta para disfrutar de la intimidad que tanto añoran las grandes estrellas de Hollywood.
La casa es de una sola planta, y está dividida en estancias que, en su gran mayoría, están abiertas directamente al exterior, sin apenas puertas que separen las diferentes habitaciones, con grandes ventanales y espacios amplio s.
Un paraíso natural
La entrada a la casa comienza con una zona empedrada, pensada para el tránsito de los coches, con pequeñas zonas verdes. Y, una vez pasado un gran arco, guiando al inquilino, se presenta un pequeño camino de piedra grisácea, ‘escoltado’ por pequeños estanques y palmeras. Un detalle que, además de potenciar la esencia exótica de la vivienda, anticipa que ésta se encuentra en plena conexión con la naturaleza que la rodea.
Como se comentaba anteriormente, la nueva casa de Matthew McConaughey dispone de espacios abiertos , lo que da sensación de amplitud. Aquí, apenas hay paredes que separen las diversas estancias que componen la mansión. Todo está conectado en perfecta armonía, dejando que toda la luz de Hawái empape las estancias interiores.
Además, los dormitorios disponen de amplios ventanales con vistas a ese entorno rodeado de palmeras y plantas exóticas, permitiendo así que todo ese paraíso natural empape cada una de las estancias.
Una cocina abierta al comedor y al salón
En la nueva vivienda de la familia McConaughey, dominan los tonos neutros (desde las tonalidades que ofrece la madera hasta el color crema), mientras que el color llega de la mano de varias plantas, colocadas en macetas de mimbre.
Echando un vistazo al techo, podemos apreciar las vigas, que, aunque cubiertas con pintura, quedan al descubierto, e incluso varios ventiladores, una de las mejores alternativas decorativas que existen frente al aire acondicionado.
La estancia principal, como se aprecia en la siguiente imagen, está dividida en tres espacios. Tres áreas que corresponderían a diferentes habitaciones de una misma vivienda.
Por un lado, la cocina, con muebles de madera, y una isla, de mármol, que da paso a un improvisado comedor, que tiene su propia mesa, alargada, y varias sillas, en una tonalidad más oscura, que la acompañan.
Por último, una consola separa ambas estancias de un acogedor salón.
Moderno y elegante
En su conjunto, la vivienda del actor destaca por su estilo moderno y elegante, donde no se abusa de los detalles decorativos. Prueba de ello da el salón, compuesto de un banco y un sofá de color crema, y dos butacas en blanco, y, como nexo de unión, una mesa baja, de madera, que se levanta sobre una alfombra de fibra natural, como marcan las últimas tendencias decorativas. Y, además, contribuye a darle potenciar el estilo natural y ‘casual’ que se respira en la casa.
El mármol y la madera, una combinación ganadora
Otro elemento decorativo que destaca en la sofisticada casa del intérprete es el mármol, que, si ya estaba presente en la cocina, también ‘toma’ un baño de revista, y con numerosos elementos de diseño, comenzando por la propia bañera , exenta y ovalada, con un grifo independiente. A sus pies, destaca, también, un elegante taburete, de madera. Y, más allá, una ducha separada por una puerta acristalada.
En cuanto al lavabo, otra parte imprescindible de cualquier cuarto, nos encontramos con dos idénticos, que se miran ‘cara a cara’, con un espejo cuadrado, con marco de madera, y una encimera de mármol, que combina a la perfección con el suelo.
Ducha ‘al natural’
Y, al fondo de la ducha, los inquilinos se encontrarán con una sorpresa: una ducha en el exterior, delimitada por un plato de madera y una pared de piedra. Y, como no podía ser de otra manera, rodeada de naturaleza .
Con vistas privilegiadas al mar
En esta vivienda, todas las estancias están conectadas entre sí y también con el mar. Quizá por ello, a la hora de decorarlas, se haya decantado por las tonalidades neutras: el paisaje ya trae consigo la viveza de lo natural.
Los diferentes dormitorios presentan unas características muy similares: ventanales que ‘se abren’ al jardín, altos techos y ventiladores.
En el caso del dormitorio principal, llama la atención el cabecero de cama, muy moderno, acolchado y de color gris, a cuyos lados se han colocado dos mesitas de noche idénticas, con dos lámparas también iguales, con una estructura de color verde agua.
A los pies de la cama, en lugar de un banco, se colocan dos butacas, orientadas para disfrutar de las vistas sin tener que salir al exterior.
Al aire libre
La conexión con elementos naturales como el agua era inevitable, dada su excepcional localización. Además, se ha instalado una piscina baja, donde las hamacas , blancas, se encuentran dentro de la misma, elevadas sobre el agua.
A apenas unos metros, se han dispuesto varias sillas alrededor de una fogata exterior ( outdoor fire pit), para entrar en calor en las frías noches de inviernto.
Y, sacando también el máximo partido a este entorno privilegiado, al fondo, se ha creado una zona de barbacoa, con dos bancos de madera, adornados con cojines de color blanco.
La zona chill out
Uniendo el interior de la casa con el jardín, un porche se abre a un idílico y exótico exterior, perfecto para disfrutar en cualquier estación del año. Con un suelo de piedra lisa y blanca, este rinconcito de la casa apuesta por los tonos neutros y por los muebles de fibras naturales, una de las ultimas tendencias en decoración. Está conformado por cuatro piezas: dos sillones, de madera, separadas por una mesa baja del mismo material, y un sofá, de tonalidad más oscura. A igual que en el resto de la casa, la naturaleza está muy presente, ya que tiene como escenario el césped, las palmeras, el mar…es un espacio muy agradable para poder descansar al aire libre sin estar bajo el sol.
Rincones con ‘esencia’
En la cocina principal también se ha reservado un rincón especial para el vino. Una pequeña bodega, que cuenta con una iluminación, muy tenue, y protegida por una cristalera para que mantenga la temperatura adecuada para los vinos.