Las mil y una versiones de la famosa estantería 'Billy' de Ikea

Está claro que a la icónica librería Billy de Ikea le sientan bien los años, ya que, aunque ha superado los 40, no tiene ni una arruga y cada día está más joven. Su altura, adaptabilidad y sus muchos usos la han convertido en una de las piezas preferidas del fabricante sueco. Con un diseño sencillo y funcional, se trata de un mueble práctico que se adapta a cualquier estancia, estilo y necesidad. Pero es mucho más que una simple estantería, estamos ante un elemento lleno de historias y sentimientos, que puede albergar, además de tus libros preferidos, los recuerdos de tus viajes, objetos familiares, adornos únicos, prendas de vestir… Todo aquello que te hace sentir en casa y que ayuda a construir un hogar. Creada en 1979 por Gillis Lundgren, dicen que la llamó Billy en honor de uno de sus amigos (Billy Liljedahl), que le pidió que diseñase una estantería que fuese útil y tuviese un diseño bonito y funcional. Y este fue el resultado.

1. En madera, abierta y con puertas de cristal

Vestida con puertas o no, en versión pequeña o grande, a todo color o en madera, con altillo en la parte superior, abierta, con puertas de cristal o ciegas, luciendo como librería, tocador, vitrina, vestidor o, incluso, como expositor. Estas 14 ideas de decoración te ayudarán a sacar partido al mueble más famoso de Ikea, del que se fabrican 15 unidades por minuto.

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2. Una vitrina en azul oscuro

Vestida en azul oscuro, a juego con la pared, esta Billy adopta la forma de una vitrina, con dos grandes puertas de cristal. Ideal para completar el ‘look’ del comedor, su color aumenta su elegancia y sofisticación. Como es muy alta, mejor déjala que luzca en solitario, como la estrella que es.

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3. Clásica y de madera 

Con puertas ciegas y de cristal en un lado y abierta en el otro lado de la pared, esta propuesta posee el encanto de las antiguas librerías, por lo que es ideal en salones clásicos. Como visualmente es más pesada, procura colocarla en un espacio amplio, luminoso y con paredes claras.

4. Tipo puente

Este formato blanco y con puertas de cristal es perfecto tanto para el salón como para el dormitorio, ya que según con qué la acompañes puede ser romántica, nórdica, sofisticada o ‘boho chic’, sin perder un ápice de funcionalidad. Aquí, se ha creado una composición tipo puente, que deja un espacio central para zona de despacho.

5. Negra, camuflada con la pared

En esta propuesta, la estantería Billy se viste de negro, logrando un toque rockero muy actual. Una buena opción en habitaciones juveniles o en salones modernos. Toma nota del sillón orejero verde: todo un guiño al pasado más 'chic'. 

6. En modo mueble bajo

La estantería Billy puede ser alta y esbelta y llegar hasta el techo o baja y alargada y aprovechar el hueco bajo una ventana, como en esta imagen, o hacer de mueble bajo en el salón. Una solución que ofrece, además, una práctica repisa en la parte superior para colocar una lámpara de sobremesa, más libros o adornos y marcos con fotografías.

7. Negra con puertas de cristal

Esta versión en negro combina dos módulos con puertas de cristal a los lados y un módulo central abierto, lo que le da un toque más personal y moderno. Coloca tras los cristales los libros y los adornos que quieras preservar del polvo y en el centro todo lo que usas habitualmente: las revistas de la semana, el libro que estás leyendo, un jarrón con flores frescas… Los apliques en la parte superior son una buena idea para copiar.

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8. Sencilla y en color blanco

A veces, la sencillez es la mejor compañera del orden, tal y como demuestra esta versión de la librería Billy de Ikea en color blanco, que combina una parte alta, formada por dos módulos, con otra a media altura. La mezcla del blanco del mueble con las piezas de arcilla y barro crea un conjunto relajante, ideal para una decoración natural.

9. En versión XL, ocupando toda la pared

Si buscas una librería como las de antes, pero moderna y actual, esta Billy que ocupa todo el paño de pared es la solución ideal. Con módulos abiertos, altillo y puertas ciegas y de cristal es tan versátil y práctica como necesites. Para que pese menos visualmente, mejor que sea del mismo color que la pared.

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10. La más atrevida de la casa

Para celebrar sus 40 años, Ikea lanzó esta edición especial en amarillo, un tono que está de máxima actualidad, ya que ha sido elegido como uno de los colores del año por Pantone. Puedes integrarla con un fondo neutro o jugar con el contraste de tonalidades entre la estantería y la pared. Atrevida, moderna, joven y fresca, lo mismo ‘toma’ la habitación juvenil, que aporta un toque especial a tu salón.

11. Como acompañante en el salón

El salón suele ser una de las estancias preferidas de la estantería Billy, aunque también se siente a gusto en el dormitorio y en el despacho, ya que demuestra su versatilidad tanto sola como bien acompañada, como en este caso, donde forma parte de una composición en la pared principal. Sus muchas versiones, medidas y colores permiten que encaje fácilmente.

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12. Un vajillero con puertas de cristal

Totalmente personalizable, la Billy permite jugar tanto con el color como con las medidas, para que crees la estantería que necesitas y que mejor encaje con el estilo de tu decoración. Así, esta en color burdeos y con el adorno de borlas en sus tiradores es ideal para ambientes de aire ‘vintage’. Recuerda que es importante que el interior esté acorde con el exterior, como aquí, con esos bonitos juegos de té, cristalería y vajilla.

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13. Una vitrina en el dormitorio

Esta Billy en tono burdeos es ideal para dar un toque de color al dormitorio, sin perder elegancia. El contraste con las paredes rosas rompe el clasicismo, logrando un resultado muy estiloso. Una buena idea es jugar también con las tonalidades de los adornos y los objetos de la estantería, creando un conjunto lleno de personalidad. 

14. Baja y de madera

La funcionalidad es la principal misión de esta estantería, por eso, además de adornos y libros, puedes colocar en ella objetos prácticos para el día a día. Ese cometido le abre la puerta a todas las estancias de la casa, incluidos el garaje o el gimnasio, como en esta propuesta en la que se han combinado dos módulos de 80 x 28 x 106 cm.