Durante todo el año 2020 como tendencia de decoración el color Classic Blue (un azul intenso) es el tono de referencia, pero esto no quita para que haya otros que suban a la pasarela este invierno. Y es que precisamente los tonos tierra hacen su aparición estelar en decoración de interiores en la temporada 2020-2021. Colores extra cálidos. Te contamos cuáles y por qué no dejarás de verlos.
Los tonos tierra con más vida
Al pensar en colores tierra solemos visualizarlos en nuetro y con luz. Y es cierto, lo son. Pero no únicamente. De hecho, la tendencia deco de este invierno combina esos "más obvios" con colores con intensidad y mucha personalidad que llenan los ambientes de calidez: terracota, sepia o teja. Básicamente colores anaranjados, marrones y rosados. Porque también son tonos tierra. Ocres y óxidos, por ejemplo, se dan cita en este salón propuesta de Bruguer. Tan otoñal e invernal como cálido y calmado. Y es que esta tendencia se inspira en los colores de la naturaleza y de la tierra.
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¿Cuáles son los colores que vestirán la casa este invierno en esta tendencia?
El sepia es ese blanco roto con dosis de arena. Uno de los más luminosos y neutros que verás este invierno en las casas de tendencia. Un básico que combinado con maderas resulta atemporal. Pero hay otros tonos tierra con los que combinar, más marcados, como terracota, teja, cúrcuma, caramelo, moka, nude, ocre… Así es posible recurrir al color para crear una atmósfera ideal. Como en este comedor, con textiles de la firma Lizzo, con una base en arenas y el toque nude medio del mantel. La madera, en cualquiera de sus versiones, no hace más que añadir calidez.
Un extra de calidez siempre
¿Por qué son (o deberían ser) los colores que vestirán el salón, el comedor o el dormitorio este invierno? Porque en los meses fríos siempre buscamos abrigar la casa, hacerla más cálida. El confort de un ambiente no depende únicamente de la calidez (imagina sino en verano…) pero sí está muy relacionada. Los tonos tierra resultan cálidos, los más cálidos, más que el rojo puro que es más estridente que cálido y que en decoración no es de los más aconsejados. Este comedor decorado por Knowhaus es un ejemplo de ese halo de confort que genera el uso de tonos tierra.
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Encajan en todos los estilos decorativos
Que sea tendencia decorar en tonos tierra este invierno no está reñido con que el uso de terracotas, sepias, ocres y tejas encaje en cualquier estilo decorativo. Para adaptar la mezcla y elección de los colores concretos tendrás que pensar en las características del espacio a decorar (tamaño, orientación y luminosidad) y en la línea del mobiliario. Ahí es donde puedes infundir contemporaneidad o tradición. Los colores se adaptan. Porque tanto un tono oscuro como un moka puede ser clásico o de lo más actual. Cómo se utilice, en qué cantidad, en qué elementos y con qué se combine cambiará el matiz. En este salón de Quefalamaria el sofá se tiñe de color caldera en una base neutra en sepia y se combina con atrevimiento con tonos azules y verdosos.
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¿Por qué decorar con esta paleta cromática?
Porque resulta increíblemente versátil y cálida. Combina entre sí los tonos mencionados y acertarás. Encajan entre ellos con un resultado confortable. Para que resulte más luminoso y sosegado apuesta por tonalidades suaves y medias de la cama. Haz que predominen los colores más claros. Para un ambiente más tradicional y potente visualmente, juega con los tonos de mayor intensidad y fuerza. Serán personales aunque más vibrantes y vivaces. La propuesta de La Redoute Interieurs para este salón es marcar estilo con una pared en terracota en la que apoya un sofá en tono tierra sepia.
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El sepia, un blanco roto que encaja con todo
El tono tierra en variedad sepia, ese banco roto no puro, pero luminoso, con un matiz "manchado", es idóneo como base que pega con todo. Ya sean otros tonos tierra de los mencionados en esta tendencia invernal como tonos más fríos (grises, por ejemplo). En este ambiente con estética entre nórdica y zen se combinan el sepia con rosas, grises y madera. Todo un acierto. Tremendamente inspirador.
Terracota intenso o rojizo, permitidos
Este es un ejemplo de cómo incoprporar este tono tierra a la decoración. Para que no resulte estridente y sí muy personal y único, opta por cederle el protagonismo en una pieza grande rodeada de tonos mucho más luminosos. Maisons du Monde usa aquí un terracota rojizo intenso en la tapicería de un sofá, donde se ubican también cojines en la gama de los tierra más intensos y luminosos pero el resto baja de intensidad: paredes en sepia, maderas naturales, fibra y tonos tierra más apagados. Si lo haces así, acertarás.
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El rosa también es un tono de la tendencia
Fíjate en este salón donde se apuesta por un sofá tapizado en rosa. Un rosa de intensidad media que también está dentro de los tonos tierra de esta tendencia. Una nota de color para un invierno diferente. Descarta las tonalidades más vivas de este color y quédate con el nude en pastel o medio, como aquí la apuesta que hace Kave Home en un espacio donde la madera de las ventanas y vigas vistas del techo son el complemento diez.
En el baño… ¡oda a los tonos tierra con color!
Este es otro ejemplo de rincón decorado en tonos tierra. En este caso, el baño de esta casa proyectada por el estudio Knowhaus apuesta por los neutros y el toque de color del rosa, nuevamente. Otro ejemplo de cómo usalo y combinarlo también en un ambiente como el baño.
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Tonos arenas, los más puros
Los marrones en la versión arena o tierra, los más puros; también con toques en moka resultan sosegados y calmados. Por eso este invierno los usarás en casa tanto en el salón y comedor como en el dormitorio, donde el efecto no puede ser más adecuado. Pon luz con tonos tierra en sepia o blanco más luminoso; actualidad con notas metalizadas, que llenan de luz la base; contemporaneidad con negro; extra de calidez con madera; y dinamismo con notas en naranja y terracota o verde.
Tono sobre tono
Otra forma de incorporar los tonos tierra en la decoración de interiores esta temporada es en un conjunto equilibrado en el que nada destaque. No hay tonos que sobresalgan sino que el acierto es elegir una neutralidad atractiva, como sucede en este ambiente decorado por La Redoute Interieurs. Una intensidad media de tonalidades tierra, muy arena. El mix con fibras naturales y madera acerca la tendencia a la naturaleza.
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El ambiente más contemporáneo: ocre y negro
Aunque el negro o gris pizarra nos son colores tierra, este estudio es un ejemplo de cómo los tonos de los que hablamos se pueden fusionar prácticamente con cualquier otro color. Aquí es el negro el que destaca, aportando elegancia y contemporaneidad a un ambiente decorado con muebles en madera y color ocre, en piezas de marcado diseño años 70. El ocre, con matices más amarillos, dorados o verdosos es otro de esos colores que no pasan de moda y que tienen un halo de elegancia.
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Tonos que encajan con la naturaleza
Precisamente porque se inspiran en ella o respiran de ella. Los tonos tierra de esta tendencia enraízan más con el exterior al combinarse con plantas en los interiores. Sería un buen compañero de viaje, el verde, en arreglos muy naturales e, incluso, en variedades más secas como ramas y hojas.
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Los materiales y acabados con los que combinar
Ya hemos ido aportando claves acerca de los acabados que mejor encanjan con esta tendencia que colorea en tonos tierra. Las maderas y las fibras son las que se acercan a la idea de naturalidad, inherente a la paleta cromática protagonista en este artículo. Pero no son las únicas. Hemos visto cómo los acabados metalizados aportan luz. El metal negro actrualiza siempre cualquier conjunto. De esta manera, con estos materiales, darás con el efecto decorativo que buscas. En cuanto a los textiles, todo está permitido, desde los más naturales y livianos como lino o algodón, hasta las telas de arpillera, lanas y terciopelos más pesados; incluso, piel y cuero.
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