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instalar mirilla digital© Adobe Stock

DIY

Cómo instalar una mirilla digital en la puerta de entrada

Un elemento práctico para aumentar la seguridad de tu hogar, que puedes colocar tú misma de forma fácil. Aprende a hacerlo paso a paso.


Actualizado 28 de septiembre de 2020 - 11:53 CEST

La seguridad en el hogar es un aspecto esencial que no debemos descuidar. Es necesario dotar a nuestra casa de sistemas que nos ayuden a incrementarla. Además de elegir alarmas, modernas cerraduras o puertas blindadas, una simple mirilla puede ayudarnos a estar más seguros. En especial si sustituimos las viejas de antaño por un modelo digital propio del siglo XXI. Descubre por qué merece la pena elegir una de estas mirillas actuales y cómo puedes instalarla tú misma. 

Mujer accionando una mirilla digital© Yale
Existe un amplio panorama de mirillas digitales para que puedas elegir la que más te conviene: un modelo sencillo que te permita simplemente ver el exterior, o una mirilla capaz de grabar imágenes o equipada con conexión wifi.

La importancia de la mirilla

Muchas cosas han cambiado en las últimas décadas relacionadas con la tecnología digital que todo lo inunda, y las mirillas de las puertas de entrada son una de ellas. Lejos de ser un elemento irrelevante, disponer de una buena mirilla es fundamental a la hora de garantizar la seguridad en tu casa. Elegir un modelo digital te brindará un mayor campo visual y una inmejorable calidad de imagen, para que puedas ver sin ningún problema y con mayor comodidad quién está llamando a tu puerta. Esto cobra especial importancia si en casa hay personas mayores.

Mirar por la mirilla© Adobe Stock
Las mirillas tradicionales no ofrecen la misma calidad de imagen que las digitales. Esto que puede parecer poco importante para las personas más jóvenes, se convierte en un impedimento para los mayores o para aquellos que tienen dificulatades de tipo visual.

La era digital

En la actualidad el mercado ofrece un amplio panorama de mirillas por las que te puedes decidir, según sean tus necesidades. En principio, optar por un modelo sencillo con una buena relación calidad-precio puede ser suficiente, aunque conviene fijarse en el tamaño de la pantalla (pensando, sobre todo, en personas mayores con menos agudeza visual).

Mirilla digital© Adobe Stock
Existen mirillas digitales muy fáciles de utilizar. Basta con presionar un botón para que la pantalla nos brinde una imagen clara del exterior.

En cuanto a las prestaciones, existen mirillas digitales que sirven simplemente para ver quién está al otro lado de la puerta de entrada, y otras más avanzadas que graban y hacen fotos. Las encuentras con sensor de movimiento (se activan en cuanto detectan la presencia de alguien), con cámara de infrarrojos de visión nocturna e, incluso, con conexión wifi para que puedas ver desde tu smartphone quien llega a tu casa aunque tú no estés.

Hazlo tú misma

Cambiar tu mirilla antigua por un modelo digital es una tarea de bricolaje de lo más sencilla. Tan solo tendrás que desmontar la primera para colocar la segunda aprovechando el orificio existente y sin ninguna complicación.

Kit de instalación de una mirilla digital© Leroy Merlin
Las mirillas digitales suelen comercializarse junto con el kit de instalación: incluye varios tubos para que puedas utilizar el más adecuado en función del grosor de la puerta, y una llave para ajustar los diferentes elementos.
  • Comienza por retirar el visor antiguo aflojando las ranuras con ayuda de una moneda, una espátula o un cuchillo romo.
  • Las mirillas digitales suelen traer un kit que incluye todos los elementos necesarios para su instalación: el elemento interior con pantalla, una pletina metálica para fijarlo, una llave para ajustar el dispositivo, la cámara exterior y una pieza cilíndrica o tubo (suelen venir tres tubos de diferentes longitudes para que utilices el necesario según el grosor de la puerta). No necesitarás más herramientas, salvo un metro y un destornillador.

Fija el elemento interior

  • La pantalla digital se fija por la parte interior de la puerta mediante una pletina o soporte metálico autoadhesivo. Antes de colocarlo conviene limpiar la superficie con alcohol para conseguir la máxima adherencia.
  • Introduce el tubo por el agujero de la pletina y después por el orificio. Para saber qué tubo necesitas, has de medir el grosor de la puerta. Presiona la pletina para que quede bien pegada.
Colocar el tubo y la pletina de fijación© Leroy Merlin
Este es uno de los pasos de instalación de la mirilla digital. La pletina sobre la que se coloca la pantalla interior se fija a la puerta mediante un adhesivo.

Coloca la lente

El siguiente paso consiste en introducir la cámara con forma de lente por la parte exterior de la puerta, ajustándola por el interior con la llave que viene incluida en el kit de instalación.

Cámara de la mirilla digital© Leroy Merlin
La cámara de la mirilla tiene forma de lente tradicional. De esta forma, no se advierte desde el exterior de qué tipo de mirilla se trata.

Coloca las pilas en la unidad interior con pantalla y conéctala a la cámara. Por último, fíjala a la pletina con ayuda de un destornillador.

Pantalla de mirilla digital© Leroy Merlin
Para fijar la pantalla a la puerta solo tienes que colocarla sobre la pletina y ajustarla con un destornillador. La instalación resulta de lo más sencillo.

¿Y si tu puerta no cuenta con una mirilla antigua?

Si no tienes mirilla, la instalación de un modelo digital puede resultar algo más compleja aunque no deja de ser un proyecto totalmente asequible. En ese caso tendrás que hacer tú misma el orificio con ayuda de un taladro.

  • Mide la altura a la que has de hacer el agujero, ni demasiado alto ni muy bajo. Ha de estar un poco por encima de la altura de tus ojos, o de los de la persona que vive en la casa, de forma que la mirilla resulte accesible.
  • Comprueba el grosor de los tubos que vienen en el kit de instalación y hazte con una broca del mismo ancho. 
  • Es importante tener en cuenta el material de la puerta de entrada para elegir la broca adecuada. Para las de madera lo mejor es utilizar una broca de pala. Comienza a taladrar despacio, colocando el taladro en posición perpendicular. Después pasa una lija por los bordes para que queden lisos.
  • En el caso de que la puerta sea metálica tendrás que usar una broca de acero específica para metal, manejando el taladro a velocidad baja.