Desde que se desatara la crisis sanitaria por el coronavirus o Covid-19, nos hemos visto obligados a permanecer en casa para evitar la propagación del virus. De repente, nuestro hogar se ha convertido en el único espacio en el que pasamos el día y la noche. La casa se ha convertido en nuestro espacio de trabajo, de entrenamiento, de juego con los más pequeños, de descanso… Por eso, ahora más que nunca es fundamental mantener el equilibrio y el bienestar en tu hogar. En este sentido, el Feng Shui se puede convertir en nuestro mejor aliado.
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El Feng Shui, que se traduce como "viento y agua", es una técnica oriental que busca el equilibrio de la energía vital de las personas a través de la distribución y la orientación de los espacios. El objetivo de este arte, que utilizaban los antiguos emperadores chinos para construir sus palacios, es generar una influencia energética positiva y armónica para que las personas que habitan esos espacios se sientan cómodas y satisfechas, tengan mayor vitalidad y una mejor calidad de vida. Algo que, en momentos especialmente complicados, es más necesario que nunca.
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Abraza el 'menos es más'
Como explica la japonesa Marie Kondo, "menos es más". Según la filosofía Feng shui, la energía vital no fluye en estancias abarrotadas de objetos. El primer paso reside en revisar todas y cada una de nuestras pertenencias y preguntarnos: '¿Esto me hace feliz?'. Debemos deshacernos de todo aquello que no solo nos quita espacio, sino también tranquilidad. Únicamente tenemos que quedarnos con piezas que realmente nos gusten, nos sean útiles y nos hagan felices para acabar con el 'ruido visual'.
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Elige un color
Los colores desprenden energía y ejercen una influencia profunda en nuestro estado de ánimo. Según el Feng Shui, cada tonalidad desprende unas determinadas sensaciones y propiedades que invadirán el espacio que escojamos. El negro transforma las emociones negativos y el rojo aporta vitalidad, energía y reduce la fatiga y la sensación de soledad, mientras que el verde hace sentirnos tranquilos y lucha contra el insomnio, el cansancio, los dolores de cabeza y los nervios. El amarillo o mostaza es idóneo para la cocina. Nos aportará mucha energía y, además, según el Feng Shui, favorece una buena digestión. ¿No es un buen momento para cambiar el color y 'salud' de nuestras paredes?
Luz, luz y luz
La luz es fundamental para conseguir que la armonía inunde nuestro hogar. Esta filosofía considera el sol como la principal fuente de luz, por lo que debemos 'exprimirla' al máximo utilizando visillos o estores. Sin embargo, como no todas las estancias gozan de la misma luz natural, debemos suplir esta ausencia a través de lámparas para que la luz fluya con equilibrio y armonía por todos los espacios. Esto quiere decir que, a través de la iluminación, debemos que conseguir que las estancias transmitan las sensaciones adecuadas. En un dormitorio buscaremos relajación, mientras que en la cocina querremos transmitir mayor energía.