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El estilo minimalista va y viene, pero el diseño limpio y cuidado nunca pasa de moda. La decoración escandinava utiliza una mezcla de texturas, contrastes y tonos suaves para que los muebles elegantes se sientan cálidos y acogedores. No es de extrañar que los ambientes neutros triunfen en las redes sociales y en las viviendas más modernas, ya que conjugan las últimas tendencias del mercado: la sostenibilidad, el almacenaje práctico y la consigna de que la belleza está en la simplicidad sin inhibiciones.
Desde sus inicios a principios del siglo XX, esta estética ha personificado una sensación de sencillez y adaptabilidad que conquista hasta a los críticos más exigentes. ¿Te gustaría hacerla posible en tu decoración de invierno? ¡Estás de suerte! Esta temporada las novedades de IKEA recuperan sus raíces nórdicas y ofrecen muebles minimalistas y funcionales. Toma nota de estos 7 consejos para dar con un hogar digno de catálogo.
1. Juega con los contrastes
En un comedor completamente blanco o de colores neutros, las estanterías son clave para combinar un aspecto tradicional con una actitud urbana. Los muebles de colores oscuros crean una declaración dramática y de alto impacto. Cargado de elegancia, el armario LOMMARP, de IKEA, aporta detalles clásicos al mismo tiempo que mantiene una simplicidad suficiente para encajar en un hogar moderno.
2. Da paso a la luz natural
La decoración escandinava tiene por bandera dar paso a la luz natural con grandes ventanas. Los diseños minimalistas de colores claros son los mejores para esta estética que tiene un objetivo: intensificar la claridad en el hogar a toda costa. Eso sí, unas cortinas oscuras es el toque ideal para los momentos en que busques relajarte y no quieras que pase el sol.
3. Duerme como un auténtico nórdico
Dale un toque nuevo a tu hogar con un cambio de textiles. A veces los pequeños detalles y una inversión mínima consiguen renovar nuestro salón o dormitorio. Una apuesta segura es cambiar los cojines o cortinas por unos acordes a la época del año. Este invierno IKEA propone motivos nórdicos de colores rojos y azules en algodón, un material natural que transpira y absorbe la humedad.
4. Convierte lo funcional en protagonista
Gracias al aspecto funcional de la decoración escandinava, el uso de piezas de almacenamiento como parte de la escenografía se duplica. Es así como la cesta o el estante que hubiera estado oculto al público pasa a ser protagonista al alcance de los invitados. Todo aquello que puede ser funcional, se convierte en una obra de arte.
5. Un nuevo mantra: menos es menos
Podríamos decir que la esencia del estilo nórdico es la elección inteligente de las piezas. Aunque el método de decorar sea minimalista, los suecos buscan la máxima funcionalidad, el ahorro de espacio y la practicidad. ¿Su objetivo? Lograr un ambiente diáfano, limpio y acogedor.
6. Recupera las piezas artesanales
Esta temporada la cerámica tiene gran protagonismo en las casas nórdicas. La vajilla STRIMMIG, de IKEA, diseñada por la ceramista Jennifer Idrizi, combina los motivos florales escandinavos y la simplicidad japonesa, logrando un aspecto moderno y limpio, con un aura artesanal.
7. Practica el arte de la sostenibilidad
Este estilo se caracteriza por su preocupación por el medio ambiente. Utilizar deshechos en la fabricación nos ayuda a reducir el uso de la materia prima y disminuir nuestro impacto medioambiental. Busca una vida más sana y sostenible en los hogares.
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