Ideas para decorar pequeños objetos con borlas

En materia decorativa hay determinados elementos que nunca pasan de moda. Las borlas son un claro ejemplo de ello. Este clásico objeto de pasamanería ha sido utilizado principalmente para vestir cortinas, cojines y otros elementos de tapicería. También es frecuente verlos en lámparas, colgadores o tiradores, sin embargo, darles una segunda vida e integrarlos, o directamente convertirlos en otros objetos menos comunes, está a la orden del día. Aunque en cualquier mercería podremos encontrar borlas muy especiales, fabricarlas en casa es algo muy sencillo (y económico).

Además, elaborándolas tú misma conseguirás objetos mucho más personales y únicos. En cuanto a los materiales se refiere puedes utilizar los que prefieras, aunque lo más habitual es realizarlas con hilo especial para bordados. Tambén puedes fabricar tus borlas a partir de otros elementos como cordones, cuero, o incluso tiras de papel. Estos pequeños tassels son ideales para integrar en cualquier elemento decorativo. Puedes utilizarlos para hacer guirnaldas de diferentes colores y colgarlos para adornar una pared vacía, cosiéndolos para alegrar un cesto de mimbre al que le hace falta una nota de color o directamente puedes utilizarlos para crear originales llaveros o marca páginas para tus libros. A continuación, te enseñamos una sencilla y rápida forma de hacerlos en casa.

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Materiales básicos
 

• 1 o varios carretes de hilo de bordar (estilo punto de cruz o similar)
• 1 cilindro o base circular de entre 3 y 4 centímetros de diámetro (En realidad se puede hacer con cualquier objeto u utensilio que tengamos en casa, como el corcho de una botella de vino o un rotulador grueso, aunque es importante tener en cuenta que, a mayor diámetro, mayor será la longitud de los flecos y viceversa. También se puede fabricar el cilindro con un par de cartulinas y un poco de celo)
• Tijeras
• 1 aguja de bordar
• Cuentas del tamaño de una avellana (tantas como borlas queramos fabricar).
   

Paso a paso
 

1. Enrollar el hilo de bordar a la base, dándole vueltas, hasta conseguir un grosor de aproximadamente un centímetro – debe estar lo suficientemente prieto para no deshacerse-. Cortar el hilo sobrante con la ayuda de las tijeras
2. Enhebrar una aguja de bordar y pasar una pequeña hebra por debajo del hilo enrollado. Realizar un pequeño nudo por encima y apretar bien
3. Por el lado opuesto al que se haya realizado el nudo, realizar un corte con las tijeras para separar la base de la futura borla
4. Cortar otro trozo de hilo y, dejando un par de centímetros de distancia desde el nudo principal, atar el segundo hilo para conseguir la cabeza de la borla. En este paso se pueden introducir cuentas de poliespan, madera u otros materiales para conseguir que la manualidad tenga más peso y consistencia
5. Recortar los flecos que hayan podido quedar desiguales.
    

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