Ideas para decorar tu mesa sin calaveras, murciélagos ni otros 'desagradables' bichos
Prepara una fiesta elegante, original y armónica sin necesidad de incluir ciertos 'repulsivos' elementos típicos de esta celebración.
Se acerca la noche más escalofriante y terrorífica del año ¡Halloween! Una celebración cada día más popular en España que divierte a niños y mayores. Además de los recurrentes y originales disfraces que marcan 'la noche de los muertos', uno de los aspectos más importantes de la celebración del 31 de octubre es la decoración. No obstante, hay determinados elementos que acaban resultando aburridos, viejos y pasados de moda. Sea como fuere, huir de lo establecido y encontrar la belleza a la hora de decorar una determinada estancia para la fiesta previa al día de Todos los Santos es algo mucho más sencillo de lo que piensas.
Colores
Puedes empezar eliminando la gama de colores clásicos de esta fiesta, donde el naranja, el negro y el rojo suelen ser los tonos predominantes. Una buena idea es recurrir al blanco. Un tono nada esperado que aportará un aura mística, espectral y de cierto aspecto victoriano que nadie olvidará. Hazte con varios botes de pintura de color blanco y varias calabazas y ponte manos a la obra. Un par de candelabros y velas del mismo tono, manteles, servilletas, cojines… Puedes romper ligeramente la monocromía introduciendo algún objeto metalizado, como la cubertería, que aportará al espacio un toque mucho más clásico y refinado. Además, una tarta de merengue con chocolate, decorada con unos fantasmitas de merengue tostado a los que les podrás pintar ojos y boca con rotuladores de tinta comestible pueden 'poner la guinda' a tu fiesta de Halloween.
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Nada de 'bichos'
Las arañas (y telarañas), serpientes, murciélagos y otros animales e insectos suelen producir rechazo, miedo y asco. Algo por lo que suelen estar presentes en casi todos los elementos decorativos de las fiestas de Halloween. Prescindir de ellos y conservar el espíritu y la esencia de la fiesta es posible. Para ello puedes poner una cama de gominolas – preferiblemente de colores amarillos y naranjas- sobre la mesa y velas que aporten un toque mágico a la mesa. Las calabazas, elemento por excelencia del otoño y de Halloween no pueden faltar en tu decoración. Forma pajaritas con las servilletas y coloca una sobre cada plato y ¡listo!
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Un toque divertido
Una idea muy original es utilizar las calabazas como 'calderos' para preparar tus recetas. Corta la parte superior de la misma haciendo pequeños cortes en zig-zag con la ayuda de un buen cuchillo y vacíala con mucho cuidado de no cortarte y no romper la corteza. A continuación prepara una buen plato de otoño rico y sabroso que destaque especialmente, además de por su sabor, por los colores. Añadiendo un par de velas a la mesa y algún que otro sutil elemento conseguirás un ambiente delicado y romántico con el que no perderás la magia de esta popular fiesta.
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