Iluminación exterior

Terrazas y jardines con una atmósfera especial

por Lola Márquez

Para disfrutar de tu jardín o tu terraza al máximo, necesitas contar con una iluminación, que no tema a la noche y te proporcione un ambiente práctico, seguro, cálido y tremendamente mágico. “La iluminación permite cambiar el cuadro visual del paisaje del día a la noche. Esto ocurre porque en la nocturnidad desaparece el color y destacan las sombras, los grises. Es, entonces, cuando la delicadeza cromática cobra mayor importancia: todos los tonos son más suaves y plumosos”, señala el paisajista Fernando Pozuelo

Sin contaminación lumínica

Según se trate de una terraza o un jardín, de la zona de estar, el comedor exterior o la piscina es preciso crear un proyecto lumínico distinto. “Aparte de su aporte estético, la iluminación debe ser funcional. Haciendo paisajismo se puede conseguir mejorar la estética visual de los lugares y la visibilidad, sin incurrir en la contaminación lumínica. Del mismo modo, la tecnología led actual hace que se puedan crear soluciones mucho más eficientes y frías térmicamente”, matiza el paisajista.

VER GALERÍA

Desde el suelo…

A la hora de diseñar el proyecto lumínico de exterior, es importante contar con todos los tipos de luz a tu alcance, ya que todos ayudarán a dar forma a tus espacios. Desde las luminarias suspendidas, muy prácticas para la mesa de comedor, hasta los modelos de suelo, empotrados y portátiles. Pueden ser proyectores pegados al suelo, que proporcionan una iluminación indirecta por lo que apenas se ve el elemento lumínico, pero sí la luz romántica que emiten. “También hay balizas altas o bajas, desde los 10 o 15 centímetros hasta un metro de altura, que nos señalizan viales, paseos o esquinas de los jardines y que deben situarse simétricamente y a la misma distancia, para que mantengan un ritmo lumínico. Sin olvidar, los pequeños leds encastrados en el suelo, que nos marcan peldaños, escaleras y determinados elementos por seguridad”, señala Pozuelo.

VER GALERÍA

… Hasta el cielo

“Además de las luminarias de suspensión, hay otro tipo de iluminación que permite hacer retroiluminaciones, ya sean panelados, apliques de pared o ubicados en la parte baja de jardinera, y es capaz de convertir un jardín romántico de día en uno absolutamente moderno al ocaso. Esta iluminación led, que puede ir dentro de estructuras, como pérgolas o corredores, aporta una gran modernidad al espacio. Además, puede ser gestionada por domótica, lo que permite cambiar el color, creando diversas escenas”, señala el paisajista.

También existe la posibilidad de dar una solución lumínica similar a la que encontramos en el interior de una estancia, haciendo el jardín mucho más acogedor. Lo conseguiremos con la colocación de lámparas suspendidas de los árboles, que generan pequeñas zonas estanciales al pie de los mismos, donde se pueden poner mesas y sillas, por ejemplo.

VER GALERÍA

La reina de la noche

Para completar nuestra iluminación exterior “se puede optar por catenarias o guirnaldas que recuerdan el ambiente festivo del sur de Europa o toda la zona mediterránea, y que se han venido usando desde antaño en todas las ferias tradicionales españolas. Las guirnaldas pueden ser de bombillas sencillas, pero también se usan con un filamento marcado o con una especie de tapa superior que le da un aire de farolillo portuario o marino. Resulta interesante la utilización de farolillos en los que hay una llama ya que aportan una luz maravillosa", aconseja Fernando Pozuelo

VER GALERÍA

Otra opción, que imita el estilo ‘deco’ del interior son lámparas de pie alto, las de sobremesa y las portátiles (una solución ingeniosa que permite cambiar de escenario al instante). Sin olvidar, las velas. Grandes aliadas del exterior, tanto para señalizar caminos, crear atmósferas mágicas o tener a raya a los insectos con mucho estilo.