La moda vintage viene pisando fuerte desde hace varias temporadas y no solo en nuestro armario. Hacernos con piezas de decoración y muebles antiguos propios de otras épocas es una tendencia que está a la orden del día dando lugar a espacios muy innovadores y, sobre todo, llenos de personalidad capaces de transportarse a otra época. Lejos de lo que pudiera parecer, hacerte con los elementos adecuados para viajar en el tiempo en tu propio hogar no tiene por qué ser demasiado costoso. Además de los tradicionales anticuarios en los que encontrar auténticos tesoros, en la actualidad existen una gran cantidad de grandes superficies especializadas en las que hallar los elementos adecuados. La clave reside en encontrar el perfecto equilibrio entre ellos y el resto de los objetos de tu casa para que el resultado no sea excesivo o demasiado anticuado. He aquí varios consejos útiles para incluir con acierto un toque vintage en tu hogar.
Mueble 'vintage' original
Invertir en un mueble vintage original de los años 50, 60 o 70 es una excelente opción a la hora de dar un nuevo toque a la decoración de tu hogar. Se trata de piezas clásicas -en ocasiones, creadas por diseñadores de prestigio- que se revalorizan con el paso del tiempo, de modo que, además, podrás tener algo único en tu propia casa. Los puedes encontrar en tiendas de anticuario o mercadillos especializados y, aunque su precio pueda ser un tanto elevado, se trata de una inversión que amortizaremos a lo largo de los años puesto que nunca pasan de moda. La clave reside en combinarlos con otro tipo de elementos de distintos estilos para crear un ambiente ecléctico muy atractivo.
Pero si tu prepuesto es reducido, no te preocupes; también podrás hacerte con una de las versiones y réplicas 'low cost' mucho más asequibles que encontrarás sin dificultad en grandes cadenas de muebles y decoración.
Rescatar y restaurar una pieza antigua
A veces rebuscar en el desván familiar puede hacer que hagamos hallazgos asombrosos. Los muebles antiguos pertenecientes a nuestros antepasados pueden disfrutar una segunda vida en nuestras casas. Ni siquiera hace falta que estén en perfecto estado. Con un poco de maña y los materiales adecuados podemos dar un aire renovado a piezas que antaño vistieron el hogar de nuestros abuelos. La restauración, además de un hobby muy entretenido, es una excelente manera de reciclar aquellos objetos que ya cumplieron con la función para la que fueron diseñados de una manera mucho más sostenible, aportándoles nuestro toque personal.
Elementos decorativos seleccionados
Si ninguna de las opciones anteriores te convence, existe una tercera alternativa para incluir un toque vintage en tu hogar de manera mucho menos invasiva. En lugar de optar por muebles y piezas de gran tamaño, pequeños objetos decorativos -tales como lámparas o relojes- pueden dotar de una gran personalidad a cualquier estancia, siempre y cuando los elijamos adecuadamente y los combinemos con acierto con el resto de los elementos sin que resulte cargante o anticuado.