1. Con nombre propio
En la decoración de salones, el sofá ha sido siempre el 'rey'. Sin embargo, a su lado, sillones, butacas y sillas han sido clave para definir espacios y dar estilo. Situación que se entiende a la perfección ante la Lounge Chair de Charles & Ray Eames. Un clásico (1956) por el que no pasa el tiempo, capaz de ofrecer asiento con estilo y de hacerte perder la cabeza, tanto como para olvidarte del sofá. Sin duda, un sillón a la altura de las circunstancias. En Vitra (vitra.com).
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
49€ al año
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
2. La más original del grupo
El sillón Up 2000 de Gaetano Pesce para B & B Italia (bebitalia.com) acaparará todas las miradas, pero además de bonito es tremendamente cómodo y ergonómico. ¿Se puede pedir más? Sí, una tapicería sin complejos que apueste por el liso en colores vibrantes (azul o rojo) o por estampados, como las rayas bicolores. Si te preguntas si tiene algo de diosa de la fertilidad, no te confundes: “Contaba una historia personal sobre mi concepto de mujer, como prisioneras de sí mismas, con una bola y una cadena”, matiza su creador.
3. Quédate a cuadros
Tan importante como el diseño de la butaca y su comodidad es la tela que la viste. Los cuadros (tartán, príncipe de Gales…) han invadido las calles (son una de las tendencias de este otoño-invierno) y también han llegado a casa, dispuestos a imprimir su estilo. Esta cachemira de Burnell de Colefax and Fowler se alía con los cuadros logrando un asiento cálido, donde refugiarte los fríos días de invierno. En Gastón y Daniela (gastonydaniela.com).
4. Colgado de ti
Nos encantan, no lo podemos remediar. Los asientos que cuelgan del techo abandonan su imagen veraniega y tropical y se hacen fuertes en los interiores más invernales. Tener a su lado el sofá Alexander de Jonathan Adler (jonathanadler.com) y no desmerecer ya es un logro en sí mismo. La decoración y las telas de la propuesta son clave para otorgar categoría a piezas con menos 'pedigrí deco’.
5. Un rincón de lectura
Menos es más y la sencillez puede ser una gran baza ‘deco’ y práctica. Simpliciter de Maxalto es buen aliado para crear una zona de lectura en el salón, que 'viva' de forma independiente al resto de elementos del ambiente. Eso sí, siempre que se trate de una estancia sin problemas de metros, ya que mide 104 x 90 cm, y necesita verse y sentirse holgado. En B & B Italia.
6. Verde que te quiero verde
Y más si se trata de un diseño del genial Gio Ponti. La butaca D.151.4 de Molteni & C es una verdadera delicia, que parece mecerte entre sus formas (por algo está inspirada en el mobiliario naval). Si no estás convencida, piensa que el verde siempre es una buena elección cromática, ya que suele liderar el top de tonalidades para el hogar. En Concepto DR (conceptodr.com).
7. La silla-comodín
Son una de las piezas más versátiles del universo del mueble, imprescindibles en el comedor, el salón y el dormitorio. Junto a la consola, al lado de los sofás, en el escritorio, en un rincón… Eso sí, para que no desmerezcan al resto de acompañantes, deben de ser tan especiales como estas diseñadas por Lázaro Rosa-Violán para Vergés (sverges.com). Un modelo que reinterpreta la clásica silla de colegio (de ahí su nombre ABC), elevándola, por su confort, resistencia y durabilidad, a lo más alto de nuestras estancias.
8. Un clásico con gancho
Cuando se unen la estética con la funcionalidad y el confort surgen piezas como la escultural butaca CH71, diseñada por Wegner en 1952 y que ahora se suma a la colección de Carl Hansen & Son (carlhansen.com). Además, al ser compacta es ideal para espacios de pocos metros, ya que no ocupa, pero ofrece las mismas comodidades que sus hermanas mayores. En DomésticoShop (domesticoshop.com).
9. Con reposapiés
Si quieres que tu asiento sea todavía más cómodo, hazte con reposapiés. Así, podrás relajarte mientras lees un libro, echas una siesta después de comer o ves la tele en posición (casi) horizontal. Evidentemente, la butaca que lo acompaña es clave ya que, sin duda, 'más vale estar solo que mal acompañado'. La Lazy de Calligaris (calligaris.com) es perfecta, gracias a sus líneas sinuosas y a su amplio asiento.
10. Un diván con espíritu terapéutico
No hemos podido resistir la tentación de incluirlo en nuestra lista, aunque se encuentra en un limbo decorativo. ¿Es un sofá, una cama, un diván…? Sea lo que sea, nos vemos sentados y relajados en él, viendo las horas pasar. Solo un 'pero', para que brille con fuerza, necesita 'aire' a su alrededor, para no agobiar con su presencia. De Léo Le Pirate (leolepirate.com).
11. Sumando fuerzas
En ocasiones, si el espacio te lo permite, combinar sofás y butacas es una buena opción para crear interiores cómodos y llenos de posibilidades ‘deco’. Puedes elegir los sillones a juego, como en esta propuesta de Natuzzi (natuzzi.com) con el modelo Cape, o apostar por diseños que contrasten y crear composiciones menos armónicas, pero más libres y eclécticas.
12. Con brazos y a lo loco
Las sillas con brazos tienen todo para triunfar en nuestras estancias, ya que son versátiles, cómodas, bonitas… Situada junto a la librería, te permite crear un agradable rincón de lectura, integrado en el salón, pero con voz propia. Esta propuesta de la interiorista y diseñadora Inés Benavides (inesbenavides.com) es un ejemplo de cómo integrarla con acierto.
13. Puro relax
Las generosas proporciones, la suavidad de la tapicería y su forma hacen de la butaca Dino de MaxDesign (maxdesign.it) el lugar perfecto para el descanso del guerrero (o la guerrera). Una pieza que encaja a la perfección en salones modernos, despachos en casa o situada estratégicamente en una zona de paso, como el final de un pasillo o el hall de entrada.
14. La tapicería importa
Y mucho, especialmente cuando intentas que una silla se integre a la perfección en salones modernos, llenos de estilo. Al ver esta propuesta de Pierre Frey (pierrefrey.com) se disipan todas las dudas. A la hora de elegir la tela, puedes utilizar una gama neutra, fácil de combinar, o una atrevida y chispeante, que te ayuda a dar fuerza al conjunto.
15. Un trono de Alta Costura
El sillón Feltri, un clásico diseñado por Gaetano Pesce, se viste con telas de Calvin Klein, mostrando el lado más exclusivo (solo se han creado 50-100 piezas) de la casa. Una pieza que, incluso, llega a adquirir la categoría de arte, por su capacidad de conmover y emocionar. Nos encanta ver cómo se reinventan los clásicos. En Cassina (cassina.com).