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La palabra mandala es de origen indio y su significado es “rueda” o “círculo”. Psicológicamente, los mandalas representan la totalidad de nuestro ser. Pero aparte del significado metafísico, estos dibujos se han puesto muy de moda últimamente, siendo utilizados en decoración como un elemento que destaca en gran medida creando un rincón tranquilo y lleno de espiritualidad.
Ahora que estamos en verano, ¡disfruta de tus días de vacaciones realizando o coloreando mandalas! Estos dibujos místicos te ayudarán a relajarte y además podrás usarlos para decorar tu casa de una manera creativa y original. A continuación, te dejamos algunas ideas para que te pongas manos a la obra y saques el artista que llevas dentro. Además, si tienes hijos, es una actividad quea los más pequeños les apasiona.
Un plus de originalidad con esta mesa
Una buena idea si tienes jardín o una terraza grande en tu hogar, es crear una mesa muy original con los dibujos de mandala en la parte del tablero.
Puedes optar por pintar un bonito diseño con las líneas en color blanco o negro y después usar colores muy vivos para completar el dibujo en el interior. ¡Un espectáculo colorido para tu jardín! Para que no se estropee con el uso, coloca un cristal encima de la misma medida que el tablero de la mesa.
Si quieres atreverte con un trabajo más complicado para entretenerte varios días, prueba con un mandala realizado con mosaicos. Calca el diseño con formas circulares, y pon un borde metálico a la mesa para que puedas pegar los azulejos o piedras de colores sin que sobresalgan. Elige la combinación de tonos que utilizarás con los trozos de azulejos o piedras decorativas y pégalos con cola especial. Será el centro de todas las miradas.
¡Una alfombra asombrante!
Si te encanta pintar, prueba a hacer tu propia alfombra con pinturas especiales para telas. Deja volar tu imaginación y crea un bonito diseño para poner en el centro del salón. Usa colores que combinen con la decoración pero que tengan algunas pinceladas de locura.
Primero calca el dibujo que elijas y repasa el contorno en color negro. A partir de ahí, tienes que ir pintando los espacios interiores mezclando colores y texturas, como puntos o cruces pequeñas. El efecto visual quedará magnífico.
Pero si eres fan de la costura, entonces atrévete con una alfombra de tela donde podrás coser el dibujo de mandala hecho con diferentes colores. Haz un patrón en papel, estraza o algún otro material similar que sea resistente. Recorta y coloca con alfileres encima de las telas y, por último, corta todas las piezas y haz la composición. Finalmente te queda coser y ¡listo!
Puedes hacer un dibujo sencillo y grande en el centro de la alfombra y combinar con pequeños diseños en los bordes y laterales.
Un cabecero que dejará sin palabras
Dale un sentido especial a tu cuarto pintando un mandala en la pared a modo de cabecero. Es un proceso algo difícil por el tamaño del mandala, pero el resultado es espectacular y lucirá perfecto como mobiliario decorativo. Puedes hacer solo el borde del mandala o atreverte a completarlo con pinturas de diferentes colores y tonalidades. Tendrás tu espacio para relajarte mientras lees o disfrutas de un sueño reparador.
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