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En la azotea o a pie de calle, la gastronomía y la decoración lucen sus mejores galas también durante los meses más calurosos del año. Durante el verano la decoración de los locales se relaja, pero no por ello pierde sofisticación ni ‘glamour’. Es más verde y florida y los materiales naturales tienen la última palabra. Estés o no de estés de vacaciones, tienes una cita con estos seis espacios al aire libre.
Patio: un vergel en la ciudad (Barcelona)
Al entrar en Patio (calle Mallorca 251, de Barcelona) parece que estás en un paraíso tropical, en un rincón de la campiña francesa o en medio de una selva porque la vegetación te sorprende y te atrapa entre sus ‘cuchillos’ (dado que se trata de un restaurante carnívoro). Después, vendrá la cocina, por supuesto. La terraza del hotel Alexandra y del restaurante Solomillo es uno de los tesoros gastronómicos (y decorativos) que nos reserva este verano la ciudad condal. El cuidado paisajismo, obra de José Farriols, apuesta por una exuberante vegetación con grandes macetas y maceteros. La madera y la exuberante vegetación contribuyen a crear un lugar cálido y acogedor, del que no querrás marcharte.
Terraza de Florida Retiro: una azotea con vistas (Madrid)
De Barcelona nos trasladamos a Madrid, a un clásico de la vida nocturna madrileña (Florida Retiro) que ha vuelto a abrir sus puertas recientemente y lo ha hecho a lo grande, como un referente como él estaba obligado a hacer: con un chef como Joaquín Felipe, un decorador como Pascua Ortega y un interiorista como Guille García-Hoz. El resultado es sencillamente espectacular. Espectacular y con vistas porque desde la Terraza de Florida Retiro (Paseo de Panamá, Madrid), y entre las copas de los árboles, se contempla el ‘pulmón’ madrileño. Una gran barra central, que recuerda la estética de los quioscos del parque se erige como corazón del espacio, rodeado por un mobiliario sencillo y funcional, que combina madera y fibras vegetales.
Honest Greens: la belleza de la sencillez (Madrid)
Nos quedamos en la capital, aunque pasamos de la azotea a pie de calle. Honest Greens (Castellana 89, Madrid) es la terraza saludable de moda, el lugar donde lo ‘veggie’ adquiere otro matiz, más honesto, más variado, más rico y con todo el sabor (¿por qué no?). Abierto al exterior, el espacio cuenta con una terraza cubierta, que en verano se abre comunicando ambos ambientes y creando un lugar dinámico, que se adapta a los diferentes momentos del día. La decoración, acorde con la filosofía de la cocina, es fresca, auténtica y sencilla, con macetas de mimbre, madera y cortinas de esparto.
Zela: un exquisito aire asiático (Ibiza)
Cogemos un barco y un avión y nos vamos a Baleares, unos de los destinos turísticos por excelencia. Zela (Avenida 8 de Agosto, 29, de Ibiza) toma su nombre de una mariposa del sudeste asiático, rara y exquisita, descripción que también se nota en su cocina –al mando de la cual está Ricardo Sanz, chef ejecutivo del Grupo Kabuki– y su interiorismo, obra de Studio Gronda (studiogronda.es). El local es un mágico jardín subtropical, también en el interior, donde predomina el verde oscuro y la flora propia de la zona, tanto al natural, con flores y plantas en un delicado jardín mural, como en los elementos decorativos, como las plumas de cerámica esmaltadas.
Bardot: un ‘pool club’ con carácter afrancesado (Palma de Mallorca)
El hotel Gran Meliá de Mar (Paseo de las Illetas 7, Palma de Mallorca) esconde un rincón secreto: Bardot. Un club situado en frente al mar en una gran terraza, con piscina, en dos alturas. La planta superior alberga el bar-restaurante y terraza con salones privados, concebidos como espacios amplios y abiertos a la luz, donde se introduce el azul del mar. La decoración, rica en detalles, telas en tonos cálidos y mobiliario de diseño, se mezcla con un irresistible encanto ‘vintage’, que rebosa ‘glamour’. Un guiño a la costa francesa que conjuga una decoración marinera y cocina mediterránea en un contexto cinematográfico.
Turqueta: un patio con mucho estilo (Valencia)
El espacio exterior de este nuevo restaurante valenciano (Gran Vía del Marqués del Tùria, 35) no es una terraza sino un patio inglés, que potencia la entrada de luz natural al resto del local. Mobiliario de jardín, una vegetación frondosa y detalles naturales, como platos de cerámicas artesanales o el techo de cañizo del porche, aportan un toque lleno de encanto y calidez.
Tarruella Trenchs Studio, artífices del proyecto, han jugado con colores y materiales naturales y tradicionales buscando que el comensal se sintiera a gusto. Y a juzgar por su éxito, así ha sido.
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