Si realmente quieres aprovechar el espacio de tu terraza, empieza por elegir un sofá esquinero. Consigues varios asientos y ocupa lo mínimo posible. Compleméntalo con algunas sillas que compartan cojín del mismo tono o estampado y ya tendrás solucionado el problema de dónde sentar a tus invitados.
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Además, aprovecha y elige un sofá que tenga espacio de almacenamiento. Seguro que te viene genial para guardar todas las cosas que no utilizas habitualmente.
La mesa de centro, sencilla y pequeña
Uno de los muebles que más dolores de cabeza nos da cuando tenemos visita es la mesa de centro. Si es muy grande no nos podremos mover con facilidad por la terraza, llegando incluso a dejar de usarla por este motivo. Por eso, para una terraza pequeña elige siempre una mesa pequeña y que no sea muy pesada y robusta. De esta manera, no solo estorbará menos, sino que llegado el momento, podremos quitarla sin mucho esfuerzo.
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Crea más espacio utilizando plantas
Las plantas pueden parecer una idea de decoración que no funciona en espacios pequeños, pero en el caso de las terrazas es perfecta. Y es que en los ambientes exteriores, los elementos vegetales crean un ambiente acogedor, consiguiendo que, incluso en espacios reducidos, nos sintamos cómodos y con ganas de pasar horas y horas allí. Además, es una alternativa perfecta para evitar las miradas de vecinos curiosos.
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Si tu terraza es muy soleada, no te olvides de la pérgola
El sol puede ser un gran aliado que consiga que pases grandes ratos en tu terraza, pero cuando se encuentra presente durante grandes periodos de tiempo, puede volverse un factor en contra. La solución perfecta se encuentra en instalar una pérgola. Puedes ponerla y retirarla cuando te apetezca, y no ocupará espacio.
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Una zona para comer, otra opción perfecta
Probablemente, si tu vivienda cuenta con una terraza pequeña, es muy posible que no tengas espacio para disponer de una zona de comedor y otra para descansar, por lo que debemos priorizar sobre cuál es la que más se adapta a tus necesidades.
En el caso de que optes por tener una zona para comer donde poder disfrutar de desayunos al aire libre o cenas interminables, el espacio que necesitas es aún más reducido que si quieres incorporar sillones.
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Basta con una mesa de hierro y unas sillas combinadas. Incluso, muchas de ellas se pueden plegar cuando no las estamos utilizando. Esta última idea puede ser perfecta para terrazas muy pequeñas en las que es necesario disponer de más espacio porque tiene otras funciones durante la rutina diaria, por ejemplo, servir de tendedero.