En muchas ocasiones, las ventanas son verdaderas protagonistas de los espacios, a pesar de no pretenderlo. Ayudan a comunicar el exterior con el interior, amplían los metros de las estancias, proporcionan un plus de luz solar, aíslan del frío y ayudan a nuestra calefacción a ser más eficientes y, sin embargo, no solemos prestarles demasiada atención, conformándonos con las que ya tenemos.
‘Rear Window’
Hoy, reivindicamos su papel en la vivienda y su valor como elemento fundamental a la hora de crear hogar. Como dice James Stewart en la película La ventana indiscreta, de Alfred Hitchcock: “la gente debería salir de sus casas y mirar hacia dentro, para variar”. ¿Qué encontrarían?”. Nosotros nos hemos atrevido a hacerlo.
Espacios con vistas
Ejercen una atracción instantánea, pocas personas pueden pasar por una ventana sin cortinas sin echar una mirada. “Quizás, simplemente, es que somos una panda de mirones” –volvemos a Stewart–. Además, las casas son cada vez más abiertas y luminosas. Se abren a la luz, el paisaje, el jardín… ¡Y el mundo! En ese sentimiento de que la casa no tenga miedos a lo que hay fuera y sea capaz de incorporarlo en la vida doméstica. Esta apertura significa también una apertura a la luz, porque con ellas ‘atrapamos’ al sol dentro de casa, beneficiándonos de sus beneficios: lograr un plus de energía (positiva, ‘of course’); mayor bienestar y una mejora en nuestro estado de ánimo.
Diseños sin fronteras
Al agrandar las ventanas de nuestra casa se difuminan y (casi) se eliminan los límites. Las viviendas crecen, aunque no en metros físicos, sí en visuales, ya que parece que, al abrir ventanales XL con perfiles invisibles, la habitación crece y aumenta de tamaño. El doble o triple acristalamiento es un gran aliado para el aislamiento de los hogares, ayudando a reducir la pérdida de calor y aumentando la insonorización. A su lado, se encuentran los perfiles con rotura de puente térmico y las carpinterías de PVC y aluminio, que permiten secciones más ligeras. Puedes apostar por diseños ‘limpios’, donde el cristal es el absoluto protagonista o jugar con diseños decorativos, donde los perfiles y los marcos son piezas esenciales en el interiorismo.
El reino de cristal
Las casas de cristal son hoy una bella realidad, con cerramientos más ligeros y transparentes. Para diluir las fronteras, es preciso buscar una permeabilidad máxima, que garantice la climatización e insonorización necesaria de la misma. Vidrios y perfiles resistentes y muy aislantes crean superficies de una gran belleza y ligereza visual que, sin embargo, no disminuye su confort térmico y acústico. Ahora nuestras casas de cristal son capaces de proporcionarnos confort, ahorro energético, estética y seguridad. Condiciones clave para crear un reino en armonía, cómodo para vivir y respetuoso con lo que viene de fuera.
Este diseño proporciona una genuina sensación de libertad, que te permite estar, al mismo tiempo, fuera y dentro. Volvemos la mirada hacia lo que nos rodea, permitiendo que se cuele en nuestras estancias, formando parte de ella. Si antes cerrábamos las cortinas y nos hacíamos herméticos, ahora nuestras casas adquieren un carácter extrovertido, que nos permite interactuar, tanto con el entorno como con nuestros vecinos y con las personas que nos rodean.