Los últimos festejos de la Navidad poseen una pizca más de 'glamour' y son menos familiares, por lo que invitan a una decoración más atrevida. Cual burbuja 'Freixenet', en Nochevieja y en la Noche de Reyes, la decoración de tu casa se vuelve brillante y excesiva. ¡Déjala que entre!
La sofisticación llega a tus estancias
Brillos, lentejuelas, dorados y plateados son las señas de identidad del tramo final de la Navidad. Se sacan los vestidos ‘de gala’, se usa un maquillaje más llamativo y especial y se vive un espíritu más festivo y menos familiar. Aunque es cierto que algunas cenas se celebran en familia, cada vez es más habitual preparar una velada con los amigos, dentro o fuera del hogar. Por eso, si ‘toca’ en tu casa, dale una pequeña vuelta a la decoración y da una bienvenida a 2016 llena de glamour y sofisticación.
Apuesta por el ‘Bling-bling’
El dorado es siempre sinónimo de lujo y esplendor y, ahora, se convierte en el broche perfecto para nuestras fiestas. Además, se trata de una de las tendencias decorativas de 2016. Por lo tanto, sobran los motivos para quererle. Deja que el oro se apodere del árbol, la decoración, los detalles de la mesa e, incluso, de los muebles. Es un recurso excelente, un simple toque dorado convierte tus estancias en espacios sofisticados y mágicos. Como tiene una gran fuerza visual, puedes jugar con él, aunque manteniendo siempre la cordura. Si eres atrevido, déjate seducir por su brillo y úsalo sin complejos ni pudor. El resultado será sorprendente y ostentoso (requisitos imprescindibles de esta estética), pero también bello, señorial y único.
Destellos en plata
El oro no tiene la exclusividad en estas fiestas, ya que a su lado brillan con la misma fuerza la plata, el cobre y las lentejuelas. Los ambientes en plateado resultan más sobrios, dentro de la sobriedad que pueden tener los metales, más elegantes y mucho menos bohemios y exagerados. Puedes poner un toque de brillo en la mesa con unos candelabros plateados, unos servilleteros, los bajoplatos o, incluso, la propia vajilla. No olvides que los detalles plateados presentan un matiz diferente a los dorados: su estilo urbano, por lo que encajan a la perfección en ambientes de estilo nórdico.
Una iluminación que crea ambiente
Y que nos transporta a lugares mágicos y llenos de ilusión, esa ilusión que tenemos al recibir el año nuevo. Las velas son imprescindibles en nuestras estancias durante los festejos navideños. En la mesa, en un rincón del salón, en el recibidor, para dar la bienvenida a los invitados… Pon una vela en tu casa y tendrás medio trabajo decorativo hecho.
Juega con ellas y con sus luces y sombras y déjate seducir por su encanto. Además, si las eliges aromáticas, su perfume multiplicará su poder y los sentidos harán el resto.