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No se les suele dar la importancia que tienen, pero durante estas fiestas son imprescindibles. Resultan, sin género de duda, los mejores ayudantes del hogar, logrando convertirte en el anfitrión perfecto. Aliados del orden, poseen la capacidad de multiplicar los metros y hacer que todo se vea en su sitio. Queridos auxiliares: ¿qué haríamos sin vosotros?
Recibimiento: dónde dejar el abrigo
Tras abrir la puerta y entablar una pequeña conversación de bienvenida, invitas a pasar al salón. ¿Y el abrigo? Primer escollo que has de salvar como anfitrión perfecto. Ver prendas sobre el sofá o tras el respaldo de una silla no es una imagen idílica, ya que no sólo incomodarán a tus invitados sino que afeará la decoración de esa noche. A la hora de colocar los abrigos, bolsos y carteras tienes dos opciones. La primera es utilizar el perchero del recibidor y es complementarlo con una silla o butaca, para dejar el bolso. Eso sí, siempre que no tengas muchos invitados. También puedes colocar un ‘burro’ (típico perchero de las tiendas) para ese fin, algo que puedes montar y desmontar en un momento. Además, como se trata de un objeto con un uso efímero, no hace falta que te gastes mucho en él. Mientras que la segunda opción es destinar una habitación a ese fin y colocar las prendas sobre la cama, por ejemplo, o en un armario.
Pon una (o dos) mesita auxiliar en el salón
Resultan imprescindibles en estas fechas, donde las mesas se llenan de copas, botellas, turrones… Lo ideal es colocar las bebidas en estas mesitas, para evitar derrames y despejar, al mismo tiempo, la mesa. Así, tus invitados estarán más cómodos y será más difícil tener un ‘accidente’ y tirar una copa en el mantel. Sitúalas estratégicamente: a un lado del sofá, junto al aparador… Hazlo de forma que no molesten, ni tropieces con ellas, pero que, a la vez, estén siempre a mano.
Aparadores y consolas: superficies extra
Cuando tus invitados lleguen, todo debe estar preparado para recibirlos. El aperitivo preparado, los postres también, las bebidas, el hielo… Para ello, puedes disponer de un mueble auxiliar para este fin, un aliado para depositar copas y botellas, preparar un ‘rincón’ del dulce o incluso usarlo para ir dejando las bandejas vacías o las copas que ya has usado. De esta forma, será más sencillo recoger después.
Papeleras y asientos extras: pequeños detalles
No los dejes pasar, una papelera por aquí, un puf en el suelo por allá. Lo reconocemos, poner un cubo en medio del salón no resulta muy estético, pero de la misma manera, tener a un invitado con una servilleta de papel o el envoltorio de un bombón en la mano, no es ni decorativo ni cómodo. Pon cestos o una papelera ‘bonita’ en una esquina o tras un mueble. Y si no quieres comprar, ‘viste’ tu papelera del despacho con papel navideño o una tela especial. Así, se integrarán mejor y serán fácilmente reconocibles. Mientras que los pufs, además de proporcionarte un asiento extra, te ayudarán a crear ambiente y a evitar sobremesas con gente de pie o apoyadas en el brazo del sofá.
Y para terminar, ten en cuenta que si quieres ser el anfitrión perfecto, cuando el timbre de la puerta suene todo debe estar preparado para recibir a tus invitados: la mesa puesta y decorada, el salón colocado, las velas encendidas, la música de fondo, el aperitivo y las copas en una mesita auxiliar.
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