El arquitecto Marco Piva nos muestra su hogar

Nos colamos en la casa del arquitecto y diseñador italiano Marco Piva, un amplio piso de tres dormitorios decorado con mucha personalidad, situado en el centro de Milán

by hola.com
Una de las mejores maneras de comprobar la calidad del trabajo de un interiorista es tener acceso a alguno de sus proyectos; ser testigo de excepción de algunos de sus trabajos. Lo mismo sucede con los arquitectos. Más aún si el hogar al que se accede es el suyo.
Por eso no hemos dudado un momento en publicar estas imágenes de la vivienda del prestigioso arquitecto y diseñador italiano Marco Piva. Un precioso piso ubicado en el centro de Milán, ciudad que le vio nacer en 1952. Esta amplia vivienda cuenta con 150 metros cuadrados en una sola planta dividida por un pasillo en dos partes simétricas en las que se ubican las cinco habitaciones de que consta. Si quieres ver más, pasa y mira.

Más información:
www.studiomarcopiva.com
* Usa las teclas derecha e izquierda para navegar por las fotos en la página
La casa mantiene la planta original porque así lo quiso el propio Piva. También los suelos son los que tenía la vivienda, un palacete que data de los años 50. En el salón, un pavimento de aspecto palaciego. Y baldosas de granito negro en los cuartos de baño y amarillo en el comedor. 
La casa está repleta de objetos con historias a menudo relacionadas con los viajes realizados por el arquitecto, que se considera ‘viajero antes que diseñador’. Por ejemplo, el Buda de la fertilidad que domina el espacio del salón central, regalado a su esposa con motivo de su embarazo. 
Una de las piezas favoritas de la familia es un prototipo de un mueble bar-móvil construido en los años 60 por un diseñador italiano, regalo de unos amigos. Está situado en el salón, entre los sofás de Moroso, diseñados por Enrico Franzolini; y la librería, de Antonio Citterio.  
El comedor, situado frente a la cocina, se puede entender como una extensión de la sala de estar, la continuación de la historia de los viajes de la familia. Por ejemplo, por Japón, de donde procede el kimono que adorna una de las paredes a modo de trofeo. En la otra, una cortina tailandesa con dos elefantes. 
La mesa de cristal que domina el comedor es un diseño ovalado del propio marco Piva, realizado en los años 80 para la firma italiana de mobiliario Bernini. Las sillas, sin embargo, son de Ikea y tienen la particularidad que se han realizado con envases reciclados de yogurt. 
En uno de los pasillos se vuelve a evidenciar el gusto de la familia del diseñador por las mezclas. Sobre la consola comprada en un viaje a Marruecos realizada con una técnica artesanal típica de la zona se apoya una lámpara de Ikea. En la pared cuelga un espejo de pan de oro adquirido en el lago Como. 
Los Piva han querido tratar el dormitorio principal como un lugar de descanso. Por eso apenas tiene elementos decorativos de carácter. La excepción son el tocador y el lujoso cabecero tapizado con tela de la firma Rubelli. Ambos son diseños del propio arquitecto.  
Beatrice es la hija del matrimonio. Tiene 12 años y las cosas muy claras. Tanto que fue ella misma quien decoró su ‘habitación de princesa’ eligiendo el color rosa y la mayoría de los muebles, como la cama, de la firma Videl; y la librería, de Tisettanta. El maniquí a escala humana había pertenecido a su madre.  
La cocina, encargada a firma Veneta, denota un estilo decorativo bien distinto al del resto de la casa. Es sencilla y muy funcional. Marco Piva lo explica así: “Tengo muy poco tiempo para dedicar a la cocina, sólo en vacaciones. Y cada día es sólo un lugar para preparar algo rápido entre un compromiso y otro”. 
También los dos cuartos de baño son sencillos y funcionales. Ambos son idénticos en cuanto a su decoración, en la que se ha continuado con la inspiración años 50. Sólo un elemento ‘emocional’ le da personalidad al espacio: la alfombra persa de los suelos, realizada de manera totalmente artesanal.  

Más sobre: