La calabaza no solo es uno de los ingredientes más otoñales, sino que es la estrella de Halloween. Es muy probable que en tu casa también hayáis tallado alguna con motivo de esta fiesta y que hayas guardado los restos sin saber muy bien qué hacer con ellos. ¡Esperemos que no los hayas tirado! En ¡HOLA! Cocina somos desperdicio cero 100% y queremos contarte cómo los aprovechamos nosotros esas sobras de calabaza.
Cuando se limpia y se talla una calabaza, son muchos los restos de pulpa y bastantes las pipas que podemos sacar. De hecho, para que el desperdicio sea menos, debemos intentar limpiarla al máximo porque todo el interior se puede aprovechar para cocinar.
Cuece o asa los restos de pulpa, mezcla con otros vegetales y prepara cremas de todo tipo, con distintas consistencias y diferentes condimentos.
Qué podemos cocinar con los restos de calabaza de Halloween
Hay multitud de recetas que se nos vienen a la cabeza para hacer con esa pulpa sobrante. Desde las clásicas cremas calentitas o las calabazas rellenas, hasta deliciosas salsas como el chutney u otras más cremosas para tomar tanto con verduras, carnes como pescados, pasando por guarniciones como calabaza frita, asada, en puré... bebidas como la cada vez más famosa spice pumpkin latte -que es un café con leche y las clásicas especias con las que se hace el pastel de calabaza: nuez moscada, canela, pimienta, clavo y jengibre-.
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Prueba a hacer chips vegetales cortando en láminas muy finas la calabaza y tostándolas en el horno con sal y aceite.
Otra forma que se nos ocurre para aprovechar esos restos de pula es cocerla y condimentarla como más te guste y preparar un puré más espeso para usarlo como relleno de una pasta casera o como parte de diferentes patés (¿Qué tal un humus de calabaza?). Y otra más, son los chips de calabaza. Nos gustan mucho para tomar como aperitivo y es tan sencillo como cortarla en láminas muy finas, echarle sal y aceite, hornear 30 minutos a 200ºC y luego condimentar con especias y hierbas-.
Y otros usos que podemos darle a esos restos de calabaza -ya sea cocida o asada- es como espesantes en sopas, guisos y salsas, por no hablar de la enorme cantidad de preparaciones dulces que podemos hacer con calabaza: bizcochos, tartas, mermeladas, magdalenas, tortitas, flanes, etc.
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Prepara tus propias pipas caseras: lávalas y seca bien para tostarlas en el horno con aderezos tanto dulces como salados.
Aprovecha también las pipas de la calabaza
Otra de las partes que podemos aprovechar de la calabaza son las semillas, que simplemente tienes que lavar, secar y aderezar como más te guste -tanto en dulce como en salado- y tostar en el horno unos 20-30 minutos a 180ºC removiéndolas de vez en cuando.
Como ves, seguimos apuntándonos al 'desperdicio cero' y a no tirar nada de lo que se pueda aprovechar. Es una cuestión de sostenibilidad, de ahorro y también de creatividad, y a los 3 nos apuntamos.