Tú también puedes hacer masa de pizza profesional ¡pero en casa!

Hay pocas cosas que nos gusten más que una pizza. Sinónimo de placer, de compartir y de pasar un rato agradable y relajado, te proponemos hacer la masa casera de una manera bastante sencilla, ¿te apuntas?

Actualizado 10 de septiembre de 2021 - 13:48 CEST10 sept 2021 - 13:48 CEST

Igual no sabes su origen pero como tantos otros platos, la pizza también surgió de la necesidad. Nació en Nápoles, concretamente procede de una masa de harina mezclada con manteca de cerdo y cocida en el horno de leña que se daba como almuerzo a los trabajadores de las panaderías en el siglo XVI. Se bautizó como ‘la bianca’ porque era de color blanco. El tomate aún tardaría en llegar nada más y nada menos que dos siglos (no olvidemos que vino de América).

Fue en el siglo XX cuando se hizo universal y de ahí se fue extendiendo casi a cada rincón del mundo. ¿Qué hay más popular que una pizza? Primero viajó de Nápoles a Estados Unidos de la mano de los emigrantes italianos… y de ahí se hizo popular en casi todo el planeta. ¡No hay receta que más haya viajado por todos y cada uno de los continentes del globo terráqueo! Y hoy encuentras una pizza hasta en los lugares más insospechados.

La pizza es algo que gusta a casi todos. A nosotros nos apasiona porque es sinónimo de placer, de compartir y de pasar un rato agradable. Y aunque puedes pedirla a domicilio o comerla en numerosos restaurantes, hacer pizza en casa, además de una opción muy saludable, es un plan de lo más entretenido, ideal para hacer con niños. Te contamos cómo hacer pizza en casa como un auténtico profesional

Trucos para hacer una masa de pizza de profesional

Los ingredientes no pueden ser más sencillos y accesibles. Ahora bien, es muy importante usar harina de fuerza, que tiene más gluten que la harina normal y levadura fresca en lugar de levadura en polvo. Y respecto al aceite… ni que decir tiene que debe ser de oliva virgen extra.
El agua debe estar templada. ¿Y qué significa esto? Pues a temperatura corporal, entre 36 y 37°C. Si está caliente, matará a la levadura (no olvidemos que es un fermento vivo) y si está muy fría no permitirá que haga su trabajo.
El secreto de las mejores pizzas está en el amasado, que debe hacerse siguiendo una técnica denominada ‘refinado’. Para refinar la masa hay que estirarla con las manos, como si formáramos un churro o un cable grueso. Luego este cable se retuerce en espiral y se unen los extremos. Esta operación se repite durante 10 minutos.
Una vez amasada, dejamos fermentar la masa. Aunque algunas de las mejores pizzerías apuestan por una fermentación lenta (¡de hasta 24 horas!), en casa, con una fermentación de una hora, será más que suficiente para obtener resultados excelentes,
La masa debe fermentar en un ambiente cálido. En invierno, o si tu casa es fría, un truco será precalentar el horno un momento, solo para que alcance unos 25 o 30 grados (nunca más de 50°C) y dejar fermentar dentro.
Después de la fermentación, siempre debemos volver a amasar un poco, para que la masa pierda tensión.
Según los expertos napolitanos… la masa de pizza no se estira jamás con rodillo. Con las manos, mucho mejor.
El horno debe estar muy caliente cuando introduzcamos la pizza, a unos 250 o 300°C, y para asegurarnos de que la temperatura en el interior del horno es homogénea, mejor con el ventilador puesto.
Los ingredientes siempre se ponen sobre la masa antes del horneado, salvo en algunos casos, que se ponen cuando la pizza sale del horno: es el caso de la rúcula, la albahaca o las anchoas.

Paso a paso: cómo hacer una masa casera de pizza

Hacer la masa en casa compensa… el resultado es espectacular y no es muy difícil. Ya lo hemos dicho, el secreto fundamental está en el amasado y en el tiempo de fermentado, pero con esta receta explicada paso a paso, te saldrá como la de un auténtico pizzaiolo profesional, que son los maestros pizzeros.

Varias recetas de pizza

Ahora que conoces lo más importante, no lo olvides 'el secreto siempre está en la masa', puedes hacer multitud de pizzas distintas, porque esta elaboración, además del queso y el tomate, admite infinidad de ingredientes distintos -sobre todo salados, pero también dulces-, formas y tamaños. Nosotros te proponemos algunas de nuestras recetas favoritas.

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Paso a paso: Pizza calzone casera

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Paso a paso: minipizzas de calabacín con pesto de eneldo

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