,type=downsize)
Afortunadamente, los patrones de alimentación a la hora del desayuno van evolucionando poco a poco hacia modelos más saludables. Quien más y quien menos, todo el mundo es consciente de que arrancar la mañana a golpe de galletas, bollería industrial o cereales azucarados no es la mejor idea. Sin embargo, aún siguen surgiendo dudas en relación a las alternativas por las que podemos optar.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 8 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 8 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
QUÉ DEBE TENER UN DESAYUNO PARA SER SANO
En realidad, si queremos desayunar (porque ni es obligatorio ni es la comida más importante del día, según contábamos en los errores a evitar para un desayuno saludable) hay muchas más opciones de las que en un principio pueda parecer. De hecho, en la variedad -saludable- está el gusto. Y es que es curioso: nos cuesta imaginar comer y cenar cada día el mismo menú, sin embargo, desayunar todos los días lo mismo nos parece lo más normal del mundo…
Entre nuestros 'aliados' para un desayuno saludable siempre estarán la fruta fresca, los frutos secos naturales o tostados (ni fritos ni salados), los cereales 100% integrales, la leche y yogures naturales sin azúcar -no tienen por qué ser desnatados-, el kéfir, as bebidas vegetales, también sin azúcares añadidos -de avena, soja, almendras…-, las frutas deshidratadas, las semillas (lino, chía, etc, mejor en polvo o remojadas previamente para beneficiarnos de sus propiedades).
Con todos estos elementos podemos prepararnos unos bowls de desayuno de lo más nutritivos, sabrosos y saciantes, variando los ingredientes para no caer en el aburrimiento.
También, aunque la fruta es siempre mejor tomarla entera, podemos preparar de cuando en cuando algún smoothie, con fruta, leche o bebida vegetal, cereales como la avena.
Si eres más de salado, también puedes comer infinidad de preparaciones, la única condición es que sean saludables. De hecho, si te sobró algo de cena (sana) la noche anterior y te apetece desayunarla, sin problema. Puedes hacerte, por ejemplo, para desayunar una tortilla francesa o uno huevos revueltos y acompañarlos con algo de fruta.
Asimismo, el pan integral 100% es perfeto para preparar tostas saludables y saladas (de aguacate, de tomate, de queso fresco, de atún en conserva, de hummus…).
Como ves, las opciones son mucho más amplias de lo que podría parecer. Aquí tienes algunas ideas en este sentido. Para acceder a su modo de elaboración solo tienes que clicar sobre botones de Leer más.
