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Calçots frescos con salsa romesco© Adobe Stock

'Calçots' al horno: disfruta en casa de la tradición catalana

La forma tradicional de cocinar esta cebolleta tierna es a la brasa, pero como no todos tenemos la posibilidad de hacerlo, te mostramos otra alternativa que es prepararlos al horno

35 min
fácil

Estamos en plena temporada de calçots. Empezó en noviembre y se prolongará hasta marzo. Nos rechiflan estas cebolletas tiernas de sabor dulce que se cultivan de una manera especial para obtener su forma alargada. Los más famosos está en la localidad de Valls (Gerona), donde cada año, se celebra la Gran Fiesta de la Calçotada el último domingo de enero. Se cocinan a la parrilla hasta carbonizarlos para después pelarlos y comerse el interior, mojándolos en una salsa -salvitxada o romesco, iguales pero la primera con ñora y la segunda con pimiento choricero-.  Como lo más habitual es no poderlos cocinar a la brasa, te proponemos hacer los calçots al horno, una forma mucho más limpia y ¡sencillíma! 

Calçots recién recogidos© Gtresonline
Calçots recién recogidos

Leer más: 'Calçots': cómo hacerlos, cómo se comen y dónde tomar los mejores

Ingredientes y preparación de los calçots en el horno

Lo único que necesitas para hacer calçots al horno son los propios calçots, sal y aceite de oliva. La salsa lleva tomate y ajo asados, pimiento choricero o ñoras, avellanas, almendras, sal, aceite de oliva y vinagre. Para hacerlos, tienes que limpiarlos y quitarles la primera capa, colocarlos en una bandeja sin amontonarlos, echar una pizca de sal y de aceite y hornear a 250ºC durante unos 15 minutos.

¿Cómo saber cuándo están hechos los calçots?

Lo calçots cocinados en el horno estarán listos cuando los veamos ligeramente dorados por fuera. Si están muy pálidos, es probable que necesiten un poco más de tiempo, pero cuidado con quemarlos. Una forma de saber si están hechos es pincharlo con un tenedor y ver que se desliza con facilidad. Esto será sinónimo de una textura tierna y jugosa, aunque el exterior quede algo más firme.

La salsa romesco es en la que se mojan los 'calçots'© Adobe Stock
La salsa romesco es en la que se mojan los 'calçots'

¿Cuál es la tradición de los calçots?

Parece ser que a finales del siglo XIX, fue un agricultor del municipio de Valls en la comarca del Alt Camp, quien empezó a cultivar de manera especial estas cebollas, las cocinó e inventó la salsa con la que se acompañan. La calçotada es una fiesta con amigos y familia que se reúnen en torno a una comida con estas cebolletas tiernas, asadas a la brasa de sarmiento y servidas en unas tejas de barro o envueltos en papel de periódico para que no se enfríen y se ponen unos grandes baberos para no mancharse cuando los mojan en romesco. Se comen también embutidos y diferentes carnes, además de unas judías blancas conocidas como monxetes y se bebe cava

Ingredientes

Para los 'calçots'
  • 40 calçots
  • sal
  • aceite de oliva virgen
Para la salsa
  • 4 tomates en rama
  • 1 cabeza de ajos
  • 50 gramos de avellanas
  • 1 rebanada de pan de hogaza
  • 45 gramos de pulpa de pimiento choricero
  • 50 gramos de aceite de oliva virgen extra
  • 30 mililitros de vinagre de jerez
  • sal
  • pimienta negra

Preparación

La salsa

  1. Lava, seca y coloca los tomates en una bandeja de horno con la cabeza de ajos.
  2. Echar por encima un chorrito de aceite de oliva y sal.
  3. Hornea a 180ºC durante unos 45 minutos.
  4. Echa un poquito de aceite en una sartén, ponla al fuego y tuesta las avellanas peladas.
  5. Saca las avellanas y en ese mismo aceite tuesta la rebanada de pan por ambos lados.
  6. Pela los tomates y los ajos asados y échalos en el vaso de la batidora.
  7. Añade las avellanas, la pulpa de pimiento choricero, el vinagre de Jerez, el aceite de oliva, sal y pimienta negra recién molida.
  8. Tritura bien hasta obtener una salsa homogénea.
  9. Y ya tienes lista la salsa romesco para acompañar con lo que prefieras.

Los calçots

  1. Lava bien los calçots para quitarles toda la tierra, corta la parte verde y las raíces.
  2. Precalienta el horno a 220-250°C.
  3. Hay dos formas de hacerlos: colocarlos en una bandeja con papel con sal y aceite tal cual o envueltos en papel de aluminio.
  4. Hornea los calçots durante unos 25-30 minutos, o hasta que estén tiernos y ligeramente dorados. 
  5. Puedes darles la vuelta a mitad de cocción para que se hagan de manera uniforme.
  6. Sirve los calçots con la salsa ¡y cada uno a comer los suyos!

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