Podríamos bautizarlos como "el dúo dinámico" de la cocina. Por separado, el huevo y el pollo son dos de las grandes estrellas de nuestra alimentación, pero juntos se convierten en una pareja con una armonía inigualable. Llenos de proteínas ambos, se complementan en sabor y textura y nos ofrecen platos absolutamente increíbles. Están presentes en todas las cocinas del mundo, con elaboraciones de lo más sugerentes, desde las más sencillas hasta las más complejas.
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Admiten todo tipo de técnicas culinarias, porque el huevo es uno de esos grandes comodines que da de sí ¡hasta el infinito y más allá! Pero es que al pollo le sucede lo mismo: a la plancha, asado, cocido, frito... ¡no sabemos cuál de los dos nos gusta más! Pero sí que son dos ingredientes que siempre están presentes en nuestra dieta, no solo por sus inmensas propiedades nutritivas, sino también por esa versatilidad gigante que nos ofrecen en el plato.
El sabor suave del huevo, que también podemos hacerlos en esa gran aliada que es la airfryer, contrasta muy bien con el sabor más intenso del pollo, y crean una combinaciones irresistibles en infinidad de preparaciones. Sus texturas se acoplan también a la perfección pues ambos, como decimos, se pueden cocinar de muchas formas diferentes. Y ambos ingredientes son excelentes fuentes de proteínas, vitaminas y minerales. Todo ello lo vas a encontrar en estas 7 deliciosas recetas con huevo y pollo.
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