Se cultivan durante todo el año, pero tanto en otoño como en invierno son las estaciones en las que las espinacas se encuentran en su mejor momento en España. Esta verdura de hoja verde se conoce desde el siglo VII cuando se cultivaron en Persia (actual Irán) por primera vez. Hacia el siglo IX llegaron a Europa y partir del XII se popularizaron en todo el Mediterráneo.
Nos gustan crudas, cocidas, salteadas, fritas, horneadas... Y puedes conseguir que gusten a todos si en la cocina las preparas de maneras atractivas, mezcladas con diferentes ingredientes, resaltando su color, aportándoles distintos sabores... Porque resultan una delicia tanto en ensaladas, como en sopas y cremas, hasta en hojaldres, pastas, guisos y un larguísimo etcétera de elaboraciones.
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¿Cuáles son las propiedades saludables de las espinacas?
En algunas culturas, las espinacas, con su hoja en forma de corazón, son sinónimo de buena suerte. Y es que buenas buenas lo son para la salud, porque son ricas en nutrientes y antioxidantes y fuente de proteínas, fibra, vitaminas y minerales.
Son muy bajas en calorías. Ricas en vitamina A, nos ayudan a mejorar la salud de nuestros ojos y fortalecer el sistema inmunitario; abundan en vitamina C, necesaria para controlar la tensión y el estrés, además de mejorar nuestra piel. Respecto a sus minerales, destaca por su contenido en magnesio, ideal para mantener nuestra musculatura y combatir el cansancio y en manganeso, imprescindible para producir energía, proteger nuestras células y mantener nuestro sistema inmunitario sano.
También destaca por aportar ácido fólico, hierro, calcio, fósforo, etc. Sin embargo, la absorción de calcio y hierro se ve reducida por la presencia de oxalatos, que son unas sales que inhiben su absorción.
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¿Cómo cocinar las espinacas?
Además de frescas, hay otras maneras de encontrarlas en el mercado como son cocidas en conserva o congeladas. Si optas por las primeras, comprueba que las hojas están tersas y firmes y de un color verde intenso. Y recuerda que las espinacas frescas no te durarán mucho, hay que conservarlas en la nevera pero su caducidad es de unos 5 días.
Pueden ser las protagonistas del plato y al mismo tiempo acompañante de muchos otros. Están muy presentes en las cocinas del Mediterráneo, Oriente Medio y Sudeste Asiático en forma de sopas, guisos, guarniciones, rellenos, tortillas y una lista interminable de elaboraciones. Aquí tienes 10 recetas sorprendentes con espinacas que invitan a cocinar con ellas.