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¿A quién no le gusta el gazpacho y especialmente en verano? Alguien habrá pero la mayoría adoramos este plato, por su sabor, por su frescura y porque es muy sencillo y rápido de preparar. Pero también porque nos permite hacer numerosas versiones a cada cual más rica y original. Su ingrediente principal es el tomate, pero en este caso lo vamos a sustituir por mango.
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Opciones para preparar gazpachos de colores
El gazpacho es un lienzo en blanco para que experimentemos con distintos ingredientes, especialmente de carácter vegetal. Y, además de con los sabores, podemos jugar con sus tonalidades.
- Si lo queremos verde, le pondremos pepino, pimiento verde, manzana verde y/o aguacate. Pero también kiwi, que nos ofrece un sabor muy particular con toques entre ácidos y dulces.
- Con remolacha, obtendremos un gazpacho de color morado que es la mar de atractivo.
- La sandía, las fresas y las frambuesas dan como resultado diferentes tonalidades de rojo y fucsia.
- Y si buscamos el color naranja, la opción es echar vegetales como el mango o la zanahoria.
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Aromatiza el gazpacho de manera distinta
El ajo, el comino y el vinagre que habitualmente se usan para la versión más tradicional, pueden reemplazarse por otros condimentos muy distintos: albahaca, orégano, menta fresca, jengibre, zumo de lima o de limón e, incluso, un poco de guindilla fresca si te van los sabores picantes.