Unas gambas de calidad pasadas por el calor de la parrilla, acompañadas con un vino blanco en su punto perfecto de temperatura, con el murmullo de las olas del mar de fondo… Pequeños placeres que, con suerte, nos regala el verano y a los que nos encanta abandonarnos como fans absolutos que somos del marisco. Y es que sí; también estos meses de calor tienen asociados sus mariscos de temporada.
A las gambas y langostinos, se suman en esta época cigalas, langostas, bogavantes, camarones… También otros mariscos (sí, mariscos) como el pulpo, los calamares, chipirones o sepias… Sin olvidar esos que, gracias a su ‘cultivo’ en las bateas, disfrutamos todo el año, caso del mejillón o las ostras.
Y para celebrar esta variedad, hoy queremos disfrutar de estos 'tesoros marinos' convirtiéndolos en ingrediente de ricas recetas como estas. Para acceder a su modo de elaboración solo tienes que clicar en el botón de ‘Leer más’.