Los chilaquiles son un platillo tradicional mexicano con una rica historia que se remonta a la época prehispánica, donde se consumían tortillas endurecidas o tostadas bañadas en salsas picantes. La etimología de la palabra "chilaquiles", que proviene del náhuatl "xīllaquīlli", significa "algo metido en chile". Se trata de un plato hecho con tortillas o totopos, salsa, queso, crema y cebolla y se pueden agregar otros ingredientes como huevos, carne, frijoles, verduras y aguacate. Los rojos, concretamente, se hacen con una salsa picante de ese color.