Hay pinchos y pinchos, preparación por antonomasia de la cocina vasca. Y este está en nuestro top ten. La terneza del solomillo de cerdo -blanco o ibérico- combina con el dulzor y la suavidad de la cebolla caramelizada y el crujiente del pan. Te mostramos cómo hacer la cebolla, que es una técnica muy fácil pero requiere de su tiempo, y la carne la cocinamos a la plancha con aceite, sal y pimienta. ¡Nada más y nada menos!
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