Cada vez estamos más familiarizados con bases de pizza que no son las clásicas. Con o sin harina, con determinados vegetales o legumbres, aromatizadas con especias, con o sin huevo... ¡Las hay para todos los gustos! Y a nosotros lo que nos gusta es experimentar e ir probando. En este caso concreto, elegimos el brócoli y la espinaca para la base y por encima le pondremos queso rallado vegano, hojas variadas, germinados y granada. La idea, para esta propuesta, es que puedan también comerla veganos y vegetarianos, de ahí que no lleve ningún ingrediente de origen animal.
Garbanzos con espinacas: la receta más sencilla y tradicionalPor Susana Baticón