Esta receta es perfecta para aprovechar algún trozo sobrante de calabaza cruda o también si te ha quedado algo cocida o asada de otras elaboraciones. Es una forma de enriquecer una masa de pizza, que también lleva harina integral, levadura, sal y otras especias. Por encima, además de queso, le agregamos tomate frito, un poco de pollo tandoori ya cocinado y también cebolla morada. La acompañamos con salsa 'tzatziki' también comprada -es la de origen griego que lleva yogur, pepino y ajo-.
Calabazas rellenas con carne y setas: el sabor del otoñoPor Susana Baticón