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Guiso de pollo y calabacín

El guiso de pollo con calabacín es una receta fácil de preparar, versátil y deliciosa y una excelente opción para una comida familiar.

80 min
fácil
4 comensales

¡Cuánto nos gusta un buen 'cuchareo'! Este guiso de pollo con calabacín es un plato que se puede disfrutar durante todo el año.  Es una receta muy fácil y queda deliciosa como todas estas recetas con pollo.

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Si no tienes calabacín a mano o te gustan otras verduras, puedes utilizarlas sin problema, este guiso admite casi de todo. Si lo que quieres es darle un poco de alegría, agrega una pizca de pimienta cayena o un chile verde picado y verás qué diferencia.

La mejor parte del pollo para este guiso es:

La pechuga de pollo es una buena opción porque su carne es más magra y tiene menos grasa. Aporta un sabor suave y se cocina rápidamente. Si quieres un guiso más sabroso y jugoso, los muslos de pollo son perfectos.Pero si te preocupa la grasa, puedes quitar la piel del pollo antes de cocinarlo.Independientemente de la parte del pollo que elijas, asegúrate de que sea de buena calidad y esté fresco.

El guiso de pollo con calabacín se puede conservar en la nevera durante 3-4 días. Puedes recalentarlo en una cazo a fuego medio o en el microondas.

Ingredientes

  • 500 gramos de pollo cortado en dados
  • 2 unidades de calabacín
  • 2 unidades de zanahoria
  • 1 unidad de cebolla
  • 1 unidad de tomate
  • 1 litro de caldo de pollo
  • tomillo
  • sal
  • pimienta negra
  • aceite de oliva
  • perejil fresco

Preparación

  1. Pela las zanahorias y pícalas en daditos. Haz lo mismo con la cebolla.
  2. Lava, seca y corta también en dados los calabacines y el tomate.
  3. Salpimenta el pollo y séllalo en una cazuela al fuego con aceite. Retira.
  4. Incorpora las verduras, sal, pimienta y tomillo y rehoga todo junto.
  5. Introduce el pollo, tapa y cocina a fuego medio-bajo durante 1 hora.
  6. Echa perejil picado por encima y ya lo puedes llevar a la mesa.