Es difícil cansarse de comer alitas de pollo. Tiernas y jugosas por dentro, crujientes por fuera, ¡gustan a casi todos! Son baratas y aceptan numerosas formas de cocinado. Aquí, las marinamos previamente para hacerlas en la freidora de aire y acompañarlas con varias verduras y chiles picantes ¡Una 'finger food' en toda regla porque no hay nada como comerlas directamente con las manos!
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