Es fácil confundir los huevos rancheros mexicanos con el 'shakshuka', pero tienen un sabor y origen completamente diferentes. El plato tunecino posee notas de azafrán y otras especias varias como comino, pimentón y cilantro y salsa harissa picante y se sirve con tostadas o con pan de pita. Los huevos se escalfan en la salsa de tomate, que lleva mucha cebolla caramelizada, pimiento verde amargo y pimiento rojo dulce. Esta receta de la sueca Tove Nilsson ¡no puede ser más deliciosa!
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