Aunque el gazpacho es conocido por ser una sopa fría de tomate, su historia se remonta a tiempo de los romanos y posiblemente incluso más atrás. Ellos preparaban una mezcla similar de pan, aceite de oliva y vinagre, 3 ingredientes que se siguen empleando hoy en día. Esta que te presentamos es una versión clásica, sin pan, que servimos con verduritas picadas muy finamente. ¡Un cóctel fantástico de minerales y vitaminas!
Ingredientes
Para el gazpacho
- 1 kilogramo de tomates maduros
- 1 diente de ajo
- 1 unidad de pepino
- 1 unidad de pimiento rojo
- 1 unidad de cebolleta
- 200 mililitros de vinagre suave
- 100 mililitros de aceite de oliva virgen extra
- 1 pizca de pimentón de la Vera
- sal
Para el picadillo
- 1 unidad de cebolla morada
- pimiento rojo
- 1 unidad de pepino
- 1 unidad de tomate
- perejil fresco
Preparación
- Lavar los tomates, secar y hacer un corte en forma de cruz por la parte de abajo.
- Hervir durante 1 minuto en una olla. Escurrir y dejar templar. Pelarlos y trocearlos.
- Lavar, secar, quitar el rabito y las semillas del pimiento y trocearlo.
- Pelar el pepino y cortarlo en trozos. Pelar el ajo. Quitar la primera capa de la cebolleta y trocearla.
- Poner en el vaso de la batidora o del robot de cocina los tomates, el pimiento, el pepino, el ajo y la cebolleta.
- Añadir el vinagre, el aceite, el pimentón, sal, agua y triturar hasta obtener una sopa homogénea.
- Enfriar en la nevera durante 3 o 4 horas.
- Servir el gazpacho bien frío con la cebolla morada, el tomate, el pepino y el pimiento rojo muy picaditos y esparcir el perejil fresco.
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