La horchata se consume habitualmente como una bebida refrescante, especialmente durante los meses de verano. Su sabor dulce y ligeramente especiado la hace perfecta para aliviar la sed cuando aprieta el calor. La vamos a convertir en la base de estos apetecibles polos caseros, a los que añadiremos también yogur y nata. ¡Un postre de lo más nutritivo y fresquito!
Gambones al horno, receta fácil y para todos los bolsillosPor Susana Baticón