Tanto la lima como el limón contienen propiedades digestivas que estimulan el sistema digestivo y favorecen el tránsito intestinal. Así que un helado elaborado con ellos para tomar después de cualquier comida ¡es una opción fabulosa! Para hacerlo, no es imprescidible que tengas heladera porque podemos prepararla a la manera más tradicional. El toque de menta también contribuye a potenciar esas propiedades y a hacerlo aún más refrescante.
Gambones al horno, receta fácil y para todos los bolsillosPor Susana Baticón