Los sorbetes están hechos de agua, fruta y azúcar y resultan una de las mejores alternativas para refrescarse pero también para tomar como digestivo después de una comida o una cena copiosas. Y probablemente el de limón sea el más popular. Te enseñamos a preparar el sorbete de limón en versión casera para que te quede de lo más cremoso. ¡Una forma ideal para poner el broche de oro a tus menús navideños antes del postre!
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Consejos para hacer sorbete de limón cremoso
- La receta básica si la quieres hacer 100% casera lleva zumo de limón, agua y azúcar para hacer un almíbar y clara de huevo para aportarle cuerpo y cremosidad.
- Hay otra opción más rápida que es utilizar helado de limón y nata para montar y terminarlo con cava, que es la que nosotros elegimos.
- Con ralladura o piel de limón conseguimos intensificar el sabor y el aroma.
- Puedes experimentar con diferentes tipos de cava (brut, semi-seco, etc.) según tu preferencia de dulzor.
- Hay a quien le gusta terminarlo, en lugar de con cava, con otros licores como Cointreâu, Grand Marnier, vodka o ginebra.
- Sírvelo en copas de cava o de cóctel y decora con limón y hojas de menta fresca.
- Si quieres prepararlo con un poco de antelación, guarda el sorbete en el congelador durante 1 o 2 horas antes de servir. Y al hacerlo, bátelo y echa en las copas.
- También puedes mojar los bordes de la copa con un poco de zumo de limón y pasarlo por azúcar para que se quede pegado.
- Tradicionalmente, además de como postre, este sorbete de limón se ha servido siempre para limpiar el paladar entre platos.