Tortilla de patata

1. Pelamos y cortamos las patatas en pequeñas rodajas finas y las metemos en un cuenco con agua para que suelten el almidón durante un mínimo de 5 minutos. Las escurrimos bien y las salamos.
2. Calentamos abundante aceite de oliva virgen extra -esto es imprescidible para que sepa como tiene que saber- en una sartén y freímos las patatas a fuego alto los primeros 4 minutos, después bajamos el fuego, tapamos la sartén y dejamos que se cocinen hasta que estén tiernas (15 minutos aproximadamente).
3. Removemos de vez en cuando para que se cocinen por todos los lados por igual.
4. Escurrimos las patatas con un colador para eliminar el exceso de aceite.
5. Batimos los huevos, salamos, incorporamos las patatas y dejamos que se empapen un par de minutos.
6. Echamos en una sartén un chorrito de aceite y cuando esté caliente volcamos la mezcla y cocinamos más o menos hecha según el gusto de cada uno. Ayúdate con un plato o una tapa para darle la vuelta, a menos que seas capaz de voltearla al aire sin que se te caiga, que es todo un arte.
7. Lo ideal es que por dentro no la cuajemos en exceso para que quede jugosa. Apagamos el fuego, y déjala en la sartén 3-4 minutos para que termine de hacerse con el calor residual.
8. Ya la tendrías lista tanto para tomar tanto en caliente, como en frío.

Si eres de 'la liga pro cebolla en la tortilla', pela, pica y pocha 1 unidad hasta que esté casi dorada en otra sartén con aceite. Añádela a la mezcla de patata y huevo y termina la receta como indicamos.