Los desayunos han cambiado desde hace unos años. En muchos hogares ya no están abonados al consabido café con magdalenas o galletas, y los boles de avena con frutas y frutos secos son cada vez más habituales. Y quien dice desayuno, dice merienda, porque la avena cocinada y cremosa sirve tanto para la primera comida de la mañana como para un tentempié de tarde. Este bol de avena, zanahoria, avellanas y granada es original porque lleva fruta y hortalizas. La zanahoria rallada aporta sabor y dulzor natural, y la granada un punto agridulce. La granada es una fruta de otoño que puedes sustituir por gajos de mandarina, frambuesas, higos frescos troceados, manzana, uvas o cerezas para poder variar y disfrutarlo durante todo el año. Saca ese paquete de avena de tu despensa y prepárate para disfrutar.
Magdalenas caseras: la receta más fácilPor Susana Baticón