Las grosellas son un fruto que aporta cantidades notables de vitamina C, vitamina A y otros antioxidantes. Las hay negras, amarillas y rojas. Elegimos estas últimas para convertirlas en una jalea al vino rosado, que es una delicia para tomar con patés, quesos, tartas, flanes... ¡y una gran cantidad de postres! Nos encanta igualmente para untar sobre unas tostadas con mantequillao queso crema y comerlas en el desayuno o en la merienda.
Magdalenas caseras: la receta más fácilPor Susana Baticón