Los huevos revueltos son una magnífica opción como alternativa salada de desayuno. Pura proteína y pocas grasas. En este caso vamos a colocarlos sobre unas tostadas de pan integral, previamente untadas con un poco de queso cremoso. Sencillísimo, rico y mucho más saludable que los típicos cereales azucarados, tan habituales -y nada recomendables- durante la primera comida del día.
Gambones al horno, receta fácil y para todos los bolsillosPor Susana Baticón