La mantequilla de caramelo salado es un invento francés con la que se hacen unos caramelos deliciosos, pero también es perfecta para tomar con infinidad de postres. Como salsa para tomar con unos crepes resulta ¡una auténtica maravilla! Es calórica, no nos vamos a engañar, pero muy de vez en cuando ¿a quién le hace daño un dulce?
'Brownie' en taza al microondas... ¡en solo 5 minutos!Por Susana Baticón