Aunque la lasaña solemos comerla caliente, también a partir de láminas de pasta podemos hacer excelentes versiones frías ideales para el verano. Y también perfectas para los que siguen dietas veganas o vegetarianas. En este caso, le ponemos unas láminas de calabacín, queso crema vegano y piñones tostados.
Gambones al horno, receta fácil y para todos los bolsillosPor Susana Baticón